Un joven de 18 años fue formalizado tras ser acusado de amenazar de muerte a su padre con un arma blanca y agredir a su madre en Punta Arenas.

Según el parte policial, el hecho ocurrió la madrugada del martes, cuando el imputado llegó a su domicilio, despertó a sus progenitores y les solicitó las llaves del vehículo “para salir a comprarse un pito”.

Ante la negativa de sus padres, el sujeto habría reaccionado con violencia. De hecho -consignó El Pingüino-, se dirigió a la cocina y regresó al dormitorio con un cuchillo.

De acuerdo a información policial, la mujer intentó proteger a su marido con un ladrillo, pero su hijo la golpeó y la encerró en una pieza. Acto seguido, derribó la puerta de otra habitación, donde se encontraba su padre, con la intención de herirlo con el arma.

Si bien ambas víctimas resultaron lesionadas, lograron huir y llegar a su vehículo, para luego dirigirse a la comisaría local para denunciar la situación.

A prisión

Con estos antecedentes, el Ministerio Público le comunicó al detenido que sería investigado por parricidio tentado. “Es evidente el ánimo no de dañar, sino dar muerte a -por lo menos- su padre. Esto va respaldado por las amenazas de muerte que son proferidas en todo momento de desarrollarse los hechos”, dijo el fiscal Sebastián González, según detalló el citado medio.

Al acusado también se le imputaron cargos por lesiones menos graves en contexto de violencia intrafamiliar en contra de su madre y dos delitos de amenazas.

Finalmente, el juez Juan Villa resolvió decretar la prisión preventiva “en consideración a que cualquier otra medida cautelar de menor intensidad resulta insuficiente para cautelar los fines del procedimiento y otorgar adecuada protección a las víctimas”.

De esta manera, el imputado permanecerá recluido en el Complejo Penitenciario de Punta Arenas durante los 50 días que durará la investigación.