De manera inmutable María del Pilar Pérez López, "La Quintrala" (59), escuchó la sentencia condenatoria que la tendrá por el resto de sus días en la cárcel.

La mujer ingresó al tribunal vestida con una chaqueta verde limón y jeans. Poco después lo hizo su sicario, José Mario Ruz Rodríguez (46).

Después de ordenar que le quitaran las esposas a los condenados, la magistrada Doris Ocampo, encargada de redactar el fallo de 872 páginas y quien además fue el voto de minoría en el más largo juicio oral de la Reforma Penal, leyó la sentencia que sepultó las esperanzas de Pérez y Ruz.

María del Pilar recibió una pena de cadena perpetua calificada por los delitos de lesiones graves en contra de su nuera Montserrat Hernando, parricidio de su esposo Francisco Zamorano y homicido calificado por la muerte de Héctor Arévalo, pareja de Zamorano.

A ello se suma el presidio perpetuo simple por el robo con homicidio consumado del economista Diego Schmidt-Hebbel, además de los frustrados en contra de su sobrina Belén Molina, su madre María Aurelia López, su hermana Gloria Pérez y su cuñado Agustín Molina.

Por ambas condenas deberá pasar al menos 60 años a la sombra antes de cualquier beneficio.

A su vez, José Ruz recibió las mismas penas por los crímenes de Schmidt-Hebbel, Zamorano y Arévalo y por los homicidios frustrados de la familia Pérez.

El tiempo que han estado privados de libertad les servirá de abono a Ruz y Pérez. El primero está en cana desde el 4 de noviembre de 2008 y ella del día 6 del mismo mes y año.

PLATA

El Tercer Tribunal Oral en lo Penal de Santiago acogió las demandas civiles a favor de las víctimas y sus parientes, y que deben pagar los condenados.

La justicia estableció que Juan José y Rocío, hijos de "La Quintrala", reciban 50 millones de pesos cada uno, Belén Molina 15 millones y 5 Aurelia López, Gloria Pérez y Agustín Molina.

A Klaus Schmidt-Hebbel y Greta Niehaus, padres de Diego, se les otorgó 150 millones de pesos. Luego de escuchar la lapidaria sentencia, la condenada bebió agua, habló con su abogado y de ahí fue devuelta a la cárcel.

CHOFER REGALÓ POEMA A LOS PAPIS DE DIEGO

Justo en el momento en que Klaus Schmidt-Hebbel y su esposa Gretta, comentaban con la prensa la condena, un hombre se acercó al lugar y les entregó un cuadro con la imagen de Cristo y un poema dedicado a Diego.

Visiblemente emocionados, los familiares de la víctima agradecieron el gesto del hombre, quien se presentó como Ricardo Navia.

"Yo también sufrí una pérdida muy grande. Me hubiera gustado haberles dado esto en otro momento", comentó el hombre, quien se desempeña como chofer de locomoción colectiva.

"Hijito mío, eres como el pétalo de una flor, Dios te llevó a su lado para enseñarte el amor". Versos como estos se podían leer en el cuadro que incluía una foto de Diego.