Un día común y corriente suele ser eterno para el ministro de Obras Públicas, Alfredo Moreno Charme (56). Y como si eso fuera poco, en las últimas semanas le ha agregado una serie de ítems a su agenda que lo tienen corriendo por buena parte del país.

"Siempre he destinado demasiado tiempo al trabajo, ya sea acá en el Gobierno o en el ámbito privado. Tengo faltas con mi familia desde hace mucho tiempo y siempre me las han cuestionado", reflexiona, mientras hace una pausa para recibir a La Cuarta en su oficina de Morandé 59.

El edificio ministerial está casi vacío y solo Moreno mantiene actividades. Con un vaso de Coca Cola en su escritorio, el ministro se da el tiempo para analizar los temas que le preocupan por estos días: la operación retorno que se desarrolló este fin de semana, la histórica sequía que afecta a buena parte de nuestro territorio y el desarrollo de la COP 25, en diciembre próximo.

"Hay una sequía muy grande, probablemente la más grande que hayamos tenido. Tenemos poca agua en los embalses y poca agua en los causes de los ríos, pero el mayor problema es convencer a la gente que la sequía es un problema mucho más de largo plazo y que debemos cambiar la mirada que tenemos", comenta, mientras se acomoda en uno de los sillones negros que mantiene en su despacho.

Corralero

Hay dos temas que sacan de la rutina política al ministro Moreno: los caballos y el fútbol. Como buen hincha de Universidad Católica goza con el presente de la franja en el campeonato nacional y, de paso, se autodefine como un hombre de campo, un "huaso". Y es la pasión por los finasangre lo que lo mantiene cercano a su familia durante los últimos meses de trabajo cercano a La Moneda, donde algunos expertos, incluso, lo han tildado como el ministro más presidenciable del gabinete.

"Nos encantan los caballos, nos encanta el campo. Tenemos un campo donde mis hijos pasaron su niñez. Compartimos el tema de caballos, tenemos una escuadra ecuestre con la que hemos recorrido el mundo donde ponemos interés común", sostiene Moreno, quien aseguró que a pesar de su pasión por el campo no es capaz de hacer un asadito en Fiestas Patrias. Lo suyo es servir las copas y ojalá tener en el plato un trozo de punta de ganso en cocción tres cuartos.

La pasión por los caballos llevó a Moreno a tener presencia con "Palmas de Peñaflor" en exposiciones en la Plaza Roja de Moscú y frente a la Reina Isabel de Inglaterra, una reconocida experta en equinos de lujo.

A PURA SERIE

A pesar de que la pega en el gobierno no le deja mucho tiempo libre, Moreno asegura que a veces se conecta a Netflix para ver series, y que hubo una que le llamó especialmente la atención. "Me gusta Designated Survivor (protagonizada por Kiefer Sutherland, que muestra como un político de medio pelo se transforma en Presidente de Estados Unidos) no es que me sienta identificado con la historia del protagonista, aunque él asumió un cargo que no le correspondía, pero me gusta mucho esa serie".

- El protagonista de la serie terminó como jefe de la Casa Blanca y muchos dicen que usted...

Para ser presidente hay que ser candidato y yo nunca he sido candidato a nada. El Presidente me pidió ser Canciller y fue una magnifica experiencia. Volví a Desarrollo Social y al MOP. Por ahora, no me he dedicado a político.