Desde hace unas semanas que los vecinos de Lampa han visto afectada su tranquilidad y buen vivir debido a las tomas ilegales de terrenos que han provocado un alza en la delincuencia del sector, provocando el miedo de aquellos que viven en los alrededores.

El pasado 21 de mayo, se realizó una denuncia debido a la llegada de un bus con aproximadamente 50 personas a bordo, todas con un claro propósito: tomarse un terreno ubicado al costado del Centro Familiar de Salud José Bauza Frau. De acuerdo a lo que declaró en esta instancia el Director de Seguridad Pública de Lampa, Ángel Ramos, las personas ya tenían todo organizado y listo para llegar e instalarse. “Ellos están actuando muy coordinadamente. Cuando llegamos con personal de Carabineros y fiscalizadores municipales a sacarlos, ya tenían todo loteado, listo para comenzar a hacer ocupación del lugar”, declaró al medio La Tercera.

Pero esto es sólo un ejemplo de lo que se ha replicado en otros sectores de la comuna y que ha cambiado por completo la vida de los vecinos. Son aproximadamente 28 tomas ilegales de terrenos que existen en Lampa, una de ellas es la que se instaló junto a la población Manuel Rodríguez, ubicada en la falda de uno de los cerros del sector, razón por la que los habitantes la bautizaron como “Lamparaíso”, y en la que actualmente vivirían más de 500 familias.

Sin dios ni ley

De acuerdo a los testimonios de vecinos, estas tomas ilegales de terrenos han generado focos de delincuencia, atemorizando a quienes viven en los alrededores y afectando su calidad de vida. “A veces, a las 11 de la mañana, teníamos una balacera a plena luz del día. Se toman territorios, te amenazan y uno ya no puede subir hasta el cerro. Uno no puede pasar”, explica una de las vecinas a Meganoticias.

Otros vecinos comentan al mismo medio que la ausencia de regulación se evidencia en que al interior de estas tomas se puede encontrar de todo, “desde narcotráfico hasta prostíbulos”. Pero no solamente la delincuencia es lo que ha afecta a los vecinos, el uso de servicios como electricidad sin una instalación regular provoca que se produzcan cortes de suministros.

“Me enfermé y cada vez estoy empeorando más. Las cajas se revientan donde todo se cuelgan”, explica una vecina de 70 años quien es oxígeno dependiente, además de asegurar que antes el sector era un lugar lindo para vivir, pero que eso ha cambiado en el último tiempo.

El alcalde de la comuna, Jonathan Opazo, reconoce lo preocupante de la situación además de recalcar que dentro de Lampa ya no pueden recibir más gente porque simplemente no dan abasto. “Nosotros no podemos seguir recibiendo vecinos, porque no tenemos cubierta las necesidades básicas y calidad de vida mínima para vecinos y vecinas. Se estiman son 20 mil personas que viven en condiciones precarias y la toma de ‘Lamparaíso’ es una de las mas preocupantes por el riesgo a la población”, explica al medio citado.