El jueves pasado no lo olvidará fácilmente el joven Aldo Schiappacasse Buckendahl (18), hijo del tremendo periodista que comenta los deportes en Canal 13.

Aldito junior, que se quema las pestañas en la Universidad Andrés Bello, la pasó malena por culpa de una banda de cumas que le vendió el cuento del tío y lo estafó con casi 6 palitos.

Como suele ocurrir, los embaucadores le dijeron que su mamita había atropellado a una mujer encinta y que la única forma de salvarla de la cárcel era haciendo un arreglín. Cayó redondo.

A 24 horas del episodio, La Cuarta intentó hablar con el estudiante, pero su taita -del mismo nombre- explicó que el lolo "quedó devastado" y que era "mejor dejarlo descansar".

Su mamita, Inge Buckendahl, también declinó hacer declaraciones y pidió paz.

El caso de Schiappacasse es sólo uno más de los cuentos del tío que andan rondando por ahí, esperando alguna presa para atacar.

Nos contactamos con los sabuesos de la BIRO Oriente, de la PDI, quienes desmenuzaron las principales formas de estafa que usan los cacos y las mejores papitas para evitarlas.

“Hay dos maneras de identificar fácilmente las estafas. La primera es teniendo en cuenta que jamás un policía le pedirá dinero o especies durante un procedimiento. La segunda, que los llamados siempre son hechos desde un celular y las empresas usan números fijos”, soltó el subprefecto Cristián Muñoz, de la PDI.

El poli añadió que “lo más complicado es que una vez que estos sujetos hacen lo suyo, destruyen los chips de los teléfonos y así es más difícil atraparlos”.

"EL ACCIDENTE TRUCHO"

El subprefecto de la BIRO Oriente, Cristián Muñoz,  explica que una de las estafas telefónicas más manoseadas por los hampones es la que afectó al retoño de Aldo Schiappacasse: el accidente trucho.

¿Cómo funciona? Un falso carabinero llama al hogar y cuenta que la dueña de casa sufrió un cototo accidente de tránsito y que, según su basta experiencia, arriesga entre 60 días y 6 meses de prisión.

Luego de meter el cuco y chamullar un buen rato, el estafador sostiene que hay una forma de salir del cacho y evitar que la señora se vaya derechito a Canadá ¡un arreglín!

“En el caso del joven Schiappacasse los estafadores fueron más ingeniosos porque usaron personajes como un abogado y una mujer llorando de fondo, aunque el fin era el mismo, pedir dinero en efectivo o especies de valor”, soltó el sabueso.

¿Cual es el truco? El o los estafadores jamás dejan de hablar con la víctima para que ésta no llame a nadie. Si le pasa, llame a su mamita y salga de la duda. Fácil.

"EL PREMIO MILLONARIO"

Para el capo de las estafas telefónicas de la PDI, el segundo lugar en el ranking se lo lleva sin lugar a dudas “El premio millonario”, un cuento simple pero efectivo, que hace de la ambición su principal aliado.

“La estafa consiste en un llamado telefónico en que le dicen a la víctima que se ganó un premio millonario como un notebook de última generación o un auto cero kilómetros”, lanzó el poli.

¿Cómo funciona? Para ganarse el premio prometido y además una casa nuevecita, la víctima debe someterse a una cotota prueba de última hora en la que compite con otros suertudos.

“Cuando la víctima decide participar, el estafador le solicita que compre tarjetas telefónicas y le dé sus números secretos o le pide que lleve una suma de dinero en especies a un lugar en particular”, explicó el subprefecto.

¿Cuál es el truco? El cuma que está al otro lado de la línea quiere puro recargar su prepago para seguir timando o vivir como rey. Si a usted lo llaman, fíjese en el número, si fuera cierto sería un 600 u 800, nunca un celular.

"LA ALARMA MALENA"

El tercer lugar de las estafas  se la lleva “la alarma malena”, un cuento nuevo pero que está causando furor entre los delincuentes que gustan de desvalijar viviendas desocupadas.

¿Cómo funciona? El cuento tiene su brillo... Un delincuente elige una casa o negocio protegido por una empresa de seguridad “X” y se lo anota al estafador.

En cuestión de minutos, “el lugar escogido recibe un llamado de su falsa empresa de seguridad, en que le dicen que su alarma está fallando y que tiene que revisarla en línea siguiendo unos fáciles pasos”, contó el funcionario policial.

¿Cual es el truco?  Los pasos que dicta el estafador no hacen otra cosa que desactivar el servicio de alarmas y una vez que el inmueble queda solito, el resto de la banda lo saquea sin ningun problema.

Si a usted le pasa, pídale al chanta que le cuelgue y que lo llame desde un número fijo. Si lo hace, éste debería ser un 600 u 800 y por nada del mundo un celular. Así de simple.

SIGA ESTOS CONSEJOS PA' QUE NO LO TIMEN 

1- Nunca, pero nunca dé nombres o datos de su prole porque los pueden usar en su contra.

2- Fíjese que las llamadas sean de un número fijo. Si no lo son, pida que lo llamen de uno.

3- Si duda de la llamada, corte y marque al toque el 134 de la PDI. Es mejor prevenir.

4- No deje que lo tengan en línea. Lo hacen para que no le cuente a nadie.

5- Las claves y números secretos, son secretos. No los comparta con desconocidos.

El subprefecto Muñoz contó que las estafas son una de las maneras más simples en que los cumas consiguen platita en efectivo o recargas para seguir estafando desde la cárcel.

Añadió que los métodos evolucionan y se hacen cada vez más creíbles.

"El llamado es a que no crean todo lo que les cuentan. A veces los premio pueden ser tentadores o la opción de salvar a un familiar también, pero es mejor asegurarse y confirmar la información", soltó el poli.