Este jueves, la primera ministra de Reino Unido, Liz Truss, anunció su renuncia al cargo apenas 45 días después de asumir.

Al respecto, aclaró que ya notificó su decisión al rey Carlos III, y que permanecerá al frente del gobierno mientras se escoge a su sustituto, elección que debería llevarse a cabo en una semana.

“Es la mejor decisión para mantener a Reino Unido en una condición económica estable”, declaró la lideresa del Partido Conservador ante Downing Street.

De este modo, Liz Truss se convierte en la primera ministra del país que menos tiempo permanece en el cargo. Su mandato, hasta el anuncio, fue de seis semanas.

¿Cómo llegó a esta determinación? Debido al caos político que atravesó durante las últimas semanas, producto de la caída del programa fiscal que anunciara el Ejecutivo el pasado mes de septiembre, al menos 17 parlamentarios pidieron su dimisión.

Asimismo, en las últimas horas del miércoles renunció su secretaria del Interior, Suella Braverman:

“Fingir que no hemos cometido errores, seguir adelante como si todo el mundo no viera que los hemos cometido y esperar que las cosas se arreglen por arte de magia no es una política seria”, dijo luego de su salida.

Y agregó: “No solo hemos incumplido promesas clave que se prometieron a nuestros votantes, sino que tengo serias dudas sobre el compromiso de este Gobierno de cumplir los compromisos del manifiesto”.