En diciembre de 2019, el Gobierno presentó con bombos y platillos a la comisión que debía cranear una modernización total al funcionamiento de Carabineros. El "estallido social" había dejado de manifiesto una serie de denuncias de atropello a los Derechos Humanos y graves fallas en los protocolos policiales a la hora de intervenir manifestaciones, por lo que al Ejecutivo no le quedó otra que intervenir.

Tres meses después, en marzo, el Presidente Piñera, en cadena nacional, reveló las conclusiones de la comisión y anunció una serie de proyectos en la línea de crear un nuevo Ministerio de Seguridad Pública y la modernización de las policías a través de reformas que debían aprobar en el Congreso. Sin embargo, la expansión del coronavirus puso la atención en la salud de la población y en seis meses poco y nada se habló de la modernización uniformada.

Pero bastó que la policía se viera envuelta en nuevos hechos de violencia y denuncias de violación de los Derechos Humanos para que la "modernización" volviera a ser tema en la sociedad civil y en Palacio. Por lo mismo, ayer se reunió el Presidente Piñera con una serie de representantes de los tres poderes del Estado, quienes tienen la misión de idear mecanismos para fortalecer la capacidad operativa de Carabineros para proteger a los ciudadanos; fortalecer la cultura y las prácticas para proteger los DD.HH. de todas las personas y "mejorar la transparencia y probidad. La comisión tiene 90 días para entregar conclusiones y modificaciones. Para ponerlas en marcha se habla de una plazo de nueve meses.

"Llegó el momento de tomarnos en serio y ser consecuentes con lo que la gente nos está pidiendo. Y por eso quiero pedirle al Congreso, en forma muy enfática y con humildad, pero con mucha fuerza, que es absolutamente necesario y urgente sacar adelante leyes que sean necesarias para poder cumplir con este objetivo de proteger el orden público y resguardar la seguridad ciudadana", recalcó el Mandatario una vez finalizada la reunión.

En la cita también participó el Fiscal Nacional, Jorge Abbott, quien aseguró que el cambio en la institución policial tiene que ser a nivel cultural y en la etapa de formación de uniformados.

"La institución por si misma debe cambiar su cultura. Hay una cultura al interior de la institución que es muy compleja. Y lo que hemos pedido es participar activamente en la formación de los carabineros, para que pueda entender en definitiva que el trabajo de Carabineros debe ser respetuoso de los derechos fundamentales de las personas", comentó Abbott.