Cuando se llevó a cabo la construcción del Puente Cau Cau y se instaló al revés uno de sus brazos, los lobos marinos que nadan por el río Calle-Calle fueron los primeros en hacerles una "foquita" a los ingenieros que se condorearon.

Esta vez, los mismos ejemplares aletean debido al diminuto espacio cedido para estar guatita al sol en la zona que siempre fue su hogar, razón por la que salieron a la Costanera de Valdivia.

La situación tiene preocupadas a las autoridades de Los Ríos, quienes en busca de una solución idearon un concurso para espantar de la vía pública a este tipo de mamíferos que no tienen predadores en nuestro país.

¿Y en qué consiste? Desde la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura le pidieron a los pescadores de las diferentes caletas del país enviar diversas ideas para encarar la compleja situación.

"El problema del lobo marino es de antigua data y enfrentarlo era urgente. Una de las medidas innovadoras que tomamos fue pedirles a los propios afectados, vale decir a los pescadores, que propusieran fórmulas para encarar las complicaciones que genera este mamífero. Estábamos muy esperanzados de que surgirían buenas ideas, y así ocurrió", planteó el subsecretario de Pesca y Acuicultura, Eduardo Riquelme.

Fue así como llegaron variadas propuestas que sacaron a relucir el ingenio del chileno. Entre las más simpáticas destaca la instalación de parlantes que emitan sonidos de orcas para espantarlos.

Los ganadores del certamen serán anunciados prontamente y se llevarán $78 millones, provenientes del Fondo de Administración Pesquero de Subpesca.

Las ideas más divertidas

1. Integrarlos a las caletas y crear la figura de un "árbitro domador", que los alimente  y transforme en una suerte de mascota para la comunidad.
2. Equipar los aparejos de pesca con dispositivos sonoros -resistentes al agua-  que imiten el sonido de las orcas, o señales acústicas similares, en alta frecuencia.
3. Impregnar las redes y los restantes implementos de pesca  con el olor de la orca, para ahuyentar al mamífero y mantenerlo lejos de las embarcaciones, en el curso de las faenas.
4. Usar drones en las zonas de pesca, con el fin de emitir sonidos de orcas y proyectar imágenes sobre el agua para asustarlos.
5. Proponen ejecutar un masivo programa de esterilización de hembras, para evitar que continúe la reproducción sin control.
6. Instalar balsas acondicionadas para que coman ahí y se conviertan en atracción turística.