Si el miércoles Rocío Guirao y Erika Romero encendieron con tutti el primer día del "Minuto Feliz" con atrevidos numeritos, lo que pasó ayer desbordó todos los cálculos iniciales.

Fue un jueves recargado con 5 candidatas ansiosas por mostrar lo suyo sobre el escenario, cual de todas más jugadas al momento de subir a la tarima y demostrar sus atributos frente a la prensa.

Desde temprano algunas de las aspirantes al trono se dejaron caer en el Hotel O'Higgins para ensayar sus coreografías, probar sonido e instalar sus escenografías    con anticipación.

Y los votantes, es decir, los californias de la prensa acreditada, aparecieron a mediodía para conseguir la mejor ubicación antes del grosso espectáculo.

ENJAULADA

La primera en saltar al ruedo fue la tierna Monti quien se hizo acompañar con bailarines y desplegó una sensual coreografía al ritmo del pop y el reggaeton.

La lindura apareció con un corto y ajustado vestido negro para quedar posteriormente cubierta sólo por un coqueto bikini rosado que arrancó aplausos de la gallá presente. Pese a que al final de su actuación un desperfecto técnico interrumpió su bailetón, la bella Monserrat Torrent no se achicó:

"Son cosas que pasan y una no puede echarse a morir. Lo importante es que hicimos lo planificado y pese a que estaba un poco nerviosa creo que a la gente le gustó bastante", nos contó la criatura que collerea con los colores del "MQH".

MAMACITA

Aún no terminábamos de aplaudir cuando apareció en escena la diosa colombiana y representante del sitio web Planetamodelos.com, Pilar Ruiz Dufay, quien usó un biombo sobre el escenario para impactar con su cambio de vestuario.

La cafetera saltó vestida de terno y camisa, pero al toque se despojó de sus pilchas para quedar con un sensual colaless negro que hizo aullar a los machotes presentes.

La rubia modelo oriunda de Medellín, dejó en claro por qué se ha convertido en una de las favoritas de la prensa: "Quiero ser reina de Viña, he sentido el cariño de los chilenos y siento que sería una buena soberana", nos contó.

ATREVIDA

No alcanzábamos a cerrar el buche cuando se vino Dominique Gallego con una performance cargada de erotismo que hizo bramar a los tetera de campo.

La ex recluta finalizó su performance con un atrevido striptease que cubrió con un paraguas negro. Lució su imponente cuerada, coqueteó con los periodistas y se dio maña pa' pararle el carro a la che Rocío Marengo: " Yo no invento romances ni me cuelgo de la fama de nadie", le lanzó de frentón a la inventora del Koala que se quedó calladita.

REMATE  DE LUJO

Para el final dos "pesos pesados" que batallan por el reinado: Paloma Fiuza y Kenita Larraín. Primero fue el turno de la potente Pops, quien pese a llegar delicada de salud igual saltó al escenario junto a sus bailarines para demostrar que sigue firme en la lucha.

La garotiña de medidas interplanetarias se lució con un show cargado a la samba, pero dejó la mansaca cuando mostró ante la prensa sus eroticones tatuajes: Uno a la altura de la pelvis y otro que reza "Fuiza" justo donde termina la espalda y empieza su monumental trasero. "¡Abusadora!", fue lo mínimo que le gritaron.

De fondo y pese a llegar más de una hora atrasada, María Eugenia Larraín confirmó que sigue siendo una de las regalonas de la prensa. Con abrigo polar blanco y bikini del mismo color, la maniquí dejó a todos con la tarasca abierta con una coreografía que incluyó uvas y que remató con una sensual ducha a un costado del escenario. Kenita volvió a confirmar su promesa de reinado: El anillo de 8 palos pa' los damnificados de cerro La Cruz y el piscinazo sin traje de baño, sólo con el bikini pintado en su pellejo. De lujo.

Por Hugo Pérez Labraña y Jorge Ruz Arias