La Cuarta entró al área chica con Vladimiro Mimica, alcalde de Punta Arenas, quien nos confidenció los momentos más durelis que tuvo a cargo del conflicto por el alza del gas.

El ex "canta goles" nos contó todas las fintas que tuvo que hacer para que el gas fuera tuyo, mío, para tí, para mí...

Además, el ex relator deportivo nos sapeó qué fue lo primero que le dijo el biministro de Minería y Energía, Laurence Golborne, cuando llegó a chantarse a Magallanes.

-¿Pensó que el conflicto se le iba de las manos?

- Nunca lo pensé, pero tenía aprensiones, porque uno sabe como comienzan estas manifestaciones pero no sabe cuándo ni cómo terminan. Nuestro mensaje siempre fue a la prudencia, para no tener más desgracias que lamentar.

-¿Cómo le afectó la muerte de las dos jóvenes magallánicas durante el conflicto?

- Ese ha sido el más grande de todos los dolores que he tenido. Me enteré porque siempre estaba recorriendo las calles, y fuimos al hospital de inmediato, pero ya no había nada más que hacer.

- ¿Qué lo marcó de todo este conflicto?

- Ver una cantidad impresionante de turistas que necesitaban salir de la región. Estaban muy angustiados. Mientras avanzaba el conflicto, había más nerviosismo.

-¿Qué dejó de lado por ser el guaripola del conflicto?

- Dormía pocas horas, porque llegábamos tarde y cansados, pero en vez de dormir nos poníamos a pensar cómo íbamos a salir del entuerto.

- ¿Qué fue lo primero que le dijo el ministro cuando llegó a Magallanes?

- Me dijo: Nos equivocamos. Reconoció los errores que había tenido el gobierno. Me di cuenta que él tenía autoridad y voluntad política para solucionar el tema. Al otro día se terminó el conflicto y quedamos todos satisfechos.

-¿Cómo fue la última reunión que tuvo con Golborne?

-La última conversación con el Ministro fue un par de horas. Fue la reunión más corta que tuvimos. Le dijimos que ya estaba la proposición, que en ese momento nos retirábamos de la conversación, para que fuera la asamblea ciudadana la que cerrara el acuerdo.