Para aproximadamente 40 mil chilenos las carreteras nacionales y extranjeras son su fuente de trabajo para la mantención de sus familias, pero también se han convertido en prostíbulos ambulantes que han propagado el sida entre los camioneros.

En el Sindicato Interempresa de Choferes de Camiones no ignoran la existencia del sida y saben que es una realidad, "pero no tenemos cifras, porque nadie se atreve a contar que está contagiado. El último dato duro es de un colega que falleció hace 6 años", dijo a La Cuarta el presidente del Sitrach, José Sandoval.

El programa Onusida considera que los camioneros son un grupo de gran riesgo y un factor importante de transmisión del virus.

"Nosotros no podemos pedirles a los camioneros que sean fieles o que cuando pasan semanas fuera de casa no se metan con prostitutas. Eso sería un absurdo. Pero lo mínimo que ellos pueden hacer es protegerse y para eso necesitamos una campaña nacional que incluya la entrega o venta de condones en las rutas y pasos fronterizos", señaló Sandoval.

El capo sindical agregó que "el grueso del problema pasa por la educación de los colegas que no les gusta ponerse condón. Es indispensable que en todas las carreteras se entreguen folletos y se pongan letreros que avisen del peligro del sida".

El problema se hizo público durante una discusión de la Comisión de Seguridad del Trabajo convocada por Don Tatán a raíz accidente de los mineros en Copiapó.

Según los propios choferes, en el norte y sur hay por lo menos doce "mataderos".

"Se trata de posadas y aparcaderos informales, la mayoría ubicados cerca de las capitales regionales, donde los choferes de camiones comparten con mujeres que se prostituyen", reconoció el asesor del Sitrach, Manuel Oyanedel.

Además de la picá del Lucho, en la Región de Coquimbo, también son conocidas las paradas nortinas en Pichidangui, La Higuera, Pajonales y Cachiyuyo. En el sur, entre tanto, el cacheteo sobre ruedas saca chispas en Putagán, Los Lirios, Itahue, Parral, Osorno y en el kilómetro 698 de la Ruta 5 Sur, cerca de Freire.

Otra zona donde el sida causa estragos entre los camioneros es el llamado "puerto seco" de Los Andes, donde las prostitutas adultas se confunden con menores de edad y travestis.

"En ese sector los más afectados son los colegas que llegan desde Paraguay, Brasil, Argentina y Uruguay. Son conductores que han cumplido viajes de hasta un mes y que detienen la marcha para contratar servicios sexuales. A esto hay que sumar el problema de la promiscuidad sexual, ya que tienen varias parejas", sostuvo Oyanedel.

"En todas estas zonas hay que instalar puntos de venta de condones, igual que en las rutas y pasos fronterizos, y también informar los riesgos que corren los camioneros al tener relaciones con prostitutas sin protegerse. Prevenir y educar es la única solución", agregó el asesor del Sitrach.

Y para evitar que los camiones se transformen en prostíbulos mientras "hacen aduana" o esperan cruzar la frontera, el presidente del Sitrach cree que también es indispensable reducir las largas esperas en el paso de un país a otro.

El presidente de la Confederación Nacional de Dueños de Camiones, Juan Araya, cuenta que los sectores más tentadores para los choferes son Arica y los puertos de Valparaíso, San Antonio, Iquique y Antofagasta.

"La triple frontera de Bolivia, Chile y Perú es una zona 'complicada', por cuanto hay transportistas que hacen aduana hasta 15 días y existe bastante presencia de colombianas, paraguayas y peruanas", dijo Araya.

Otro territorio caliente para los camioneros, especialmente para los que se pegan el pique a Brasil, es Uruguayana, en la frontera argentino-brasileña, "donde se llegan a juntar unas 8 mil máquinas. Hay choferes que están afuera hasta un mes y la verdad es que no se preparan para ir a la guerra. Las 'ocasiones' suelen pillarlos desprevenidos", señala Araya.

A juicio del dirigente camionero, el sida en el sector transporte "es un tema que sigue siendo tabú y que se oculta porque falta educación y cultura. Los choferes saben con lo que van a encontrarse en la ruta y, por lo mismo, deberían proveerse de preservativos, sobre todo en las fronteras".

Frente al aumento del sida, Araya anunció que a partir de noviembre se realizará un encuentro tripartito entre los dueños de camiones, los choferes sindicalizados y consultores de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

"Queremos prevenir la transmisión del VIH y fijar el comportamiento de los camioneros, en especial, el de los transportistas de larga distancia", señaló Juan Araya.

"Una de las principales medidas a tomar será la entrega o venta de condones en la carretera, ya sea en los peajes, en las zonas de descanso o en los servicentros. Eso hoy no existe", indicó el dirigente.