"Se escuchan gritos debajo de los escombros. Esto es horrible".

La frase de Ian Rodgers, voluntario de "Save the Children in Haiti", revela la más cruda consecuencia del terremoto de 7,3 grados en la escala de Richter que afectó al país isleño la tarde del martes.

Puerto Príncipe, la capital, está en el suelo por culpa del peor sismo sufrido por la isla en 150 años.

El primer ministro haitiano, Jean-Max Bellerive, estimó que el total de personas fallecidas podría superar las 100 mil.

Esta cifra podría ser aún más alta, según Bellerive, quien aprovechó de confirmar que el aeropuerto de la capital no sufrió mayores daños.

Hospitales, escuelas, cines, lugares públicos, todo está en el suelo. No hay electricidad, no hay teléfonos. Comunicarse es casi imposible.

La Cruz Roja Internacional estimó que la cantidad de damnificados superaría los 3 millones de personas, es decir, casi un tercio de la población de Haití.

Una de las personas desaparecidas luego del terremoto es Hédi Annabi, jefe de la Misión de Naciones Unidas en Haití (Minustah).

El diplomático, de 65 años,  se encontraba en el cuartel del organismo internacional en Puerto Príncipe, que resultó completamente destruido y desde donde han sacado casi una veintena de muertos.

Algunos reportes de agencias lo daban por muerto atribuyendo la información al propio presidente de Haití, René Preval. Sin embargo desde la ONU reportan que no tienen la seguridad de que su embajador haya muerto.

Carrefour fue la localidad más afectada por el terremoto y la que sufrió los peores daños.

"Las bajas, que son muchas, sólo pueden ser estimadas", dijo Vincenzo Pugliese, un vocero de la misión de la ONU en Haití.

"Un número desconocido, decenas sino cientos de miles, ha sufrido diferentes grados de destrucción en sus casas", agregó.

Entre los fallecidos, se cuentan 23 soldados de los Cuerpos de Paz: 11 brasileños, un argentino, tres jordanos y ocho chinos.

Desde la ONU se informó que las prioridades para la ayuda son expertos en rescate y cuadrillas con perros.

El Banco de Desarrollo del Caribe ya anunció que entregará 700 mil dólares en forma inmediata a Haití para combatir los devastadores efectos del sismo, en especial para asegurar agua potable, comida, medicinas, alojamiento y la restauración de los servicios de urgencia.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, también anunció apoyo y calificó la situación como "verdaderamente descorazonadora".

"Tenemos que prepararnos para horas y días difíciles. La gente en Haití tendrá el pleno respaldo de Estados Unidos", dijo Obama que se pone con helicópteros, máquinas pesadas y unidades especiales.

El mundo del espectáculo también se hizo eco de la solicitud de ayuda. Hasta Paris Hilton pidió que la gente se sensibilice.

La cantante colombiana Shakira hizo un llamado en su blog a dar apoyo a través de la Unicef: "No me puedo imaginar la devastación que ha golpeado su ya debilitada infraestructura. El pueblo de Haití necesita nuestra ayuda inmediata".