Muriel Rojas (16) escogió estudiar mecánica en su liceo alentada por su mamita. Al principio la chiquilla no quería, pues no cachaba bien de qué se trataba la carrera. Pero con el tremendo regalo que le hizo la Embajada de Japón a su cole, se puso las alcalinas y ahora sólo sueña romperla entre las tuercas y fierros.

La lola se enchufó con su futuro, luego de que el programa "Asistencia para proyectos comunitarios", de los nipones en nuestro país, le regalara un bacán equipamiento de máquinas al Liceo Industrial y de Minas Ignacio Domeyko, de la comuna de Recoleta, cuyo director, Gustavo Sandoval Aguilera, quedó entero feliz con la paleteada nipona.

Con las máquinas los jóvenes podrán construir tuercas, tornillos y pernos, además de trabajar otro tipo de materiales para llegar a armar máquinas espaciales si quieren. Y no es talla, logooo...

"Estas máquinas son de última generación y ahora tenemos lo mejor de Chile en cuanto a materiales para hacer las clases", lanzó Muriel.

La chiquilla agradeció a los japoneses por todo el apoyo que le brindaron en su enseñanza."Se nota que son solidarios los japoneses, porque esto es más fácil de usar y es lo que vemos regularmente en las prácticas", contó.

Por su parte, el ministro consejero de la Embajada de Japón en Chile, Yashui Imai, destacó el aporte que tendrán las máquinas para el desarrollo de los peques y felicitó a Chilito por apoyar a sus terremoteados compatriotas.

"Estas herramientas para rectificar la desigualdad social, son fruto de la confianza entregada hacia Japón. Es por eso que quiero expresar mi agradecimiento al pueblo chileno por todo el apoyo que nos han entregado", expresó el japonés en el auditorio del colegio donde se realizó la ceremonia de inauguración del equipamiento.