Nieve y matemática: la historia de la colombiana detrás de Holiplay
Llegó a Chile y se enamoró. Vio una oportunidad para resolver un problema y ahora esa una exitosa emprendedora.

Vino a conocer la nieve y se enamoró. Así comienza la historia de Adriana Rubio (47 años) una colombiana que jamás pensó que una visita a Chile le cambiaría la vida. Ella dice que conocer a Matías, su actual esposo chileno, fue obra del destino y a la vez una casualidad, "todo fue enfocado para que nos podamos cruzar, justo en la milésima exacta". Se conocieron e intercambiaron teléfonos y así empezó su historia.
Comenzaron a hablar y poco a poco a acercarse, y sin darse cuenta, a pesar de la distancia que los separaba, la relación entre ellos se hizo cada vez más fuerte. Matías la invitó a conocer más de Chile y ella volvió a viajar. Quedó fascinada con lo que recorrió; esto y una oferta de trabajo la empujaron a quedarse. Pero hasta entonces Matías y Adriana todavía no concretaban.
La situación amorosa incierta entre ambos y una crisis en la empresa en que trabajaba Adriana provocaron que ella volviera a Colombia. Es aquí cuando Matías se da cuenta que ella era el amor de su vida y que no la podía perder. Terminó con su antigua relación y se decidió por la colombiana.
Adriana volvió nuevamente a Chile, pero ahora de verdad. Ambos tenían hijos, por lo que formaron una gran familia. En un principio las cosas no se dieron como ella esperaba, le costó demasiado encontrar trabajo y le robaron en una de las empresas, eso la aterró. Como primera experiencia dice haberlo pasado muy mal, entrando en una depresión.
Los problemas económicos casi los llevan a la quiebra, ella intentaba pensar positivo pero era muy difícil, como cristiana sentía que Dios no la estaba ayudando. "Fue ahí cuando le pregunté a Dios si mi futuro estaba acá en Chile y él me dijo que sí".
Su vida estaba patas arriba, hasta que un domingo como cualquier otro, se le acercó la hija de su esposo porque necesitaba ayuda para una prueba de matemáticas que hacía al día siguiente. Ella con gusto la ayudó. La niña tenía que aprender las tablas de multiplicar, a Adriana le llamó mucho la atención que tenga que aprender las tablas a los once años.
Para que sea entretenido y dinámico creó juegos interactivos que facilitaron el aprendizaje de la niña. En dos horas y por casualidad, inventó el 95% de lo que sería su nuevo proyecto. Así nació Holiplay, empresa que a Adriana le cambió la vida.
El emprendimiento que la llevó al éxito
En un principio era muy costoso producir, pero de a poco fueron buscando cómo realizar los juegos. Cuando lanzaron la primera versión vendieron más de 1.000 ejemplares en sólo seis meses. Luego postularon a las "Academics Choice Award", en donde ganaron uno de los premios. El negocio logró ser tan exitoso que se fue extendiendo por varios países del mundo y comenzaron a crear nuevas versiones.
https://www.youtube.com/watch?v=t3ZU19djNMw
Adriana, no solo ayudó a la hija de su esposo, sino que además vio un déficit en la educación chilena que la incentivó aún más a realizar estos juegos. Ella halló lo que le gusta gracias al amor que encontró conociendo la nieve.
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