La desaparición de Emanuela Orlandi es uno de los misterios más grandes del Vaticano, incluso, tiene su propia serie documental en Netflix llamada “La chica del Vaticano”, estrenada solo hace unos meses en la plataforma.

La adolescente de 15 años desapareció en extrañas circunstancias el 22 de junio de 1983, cuando no regresó a su casa después de una clase de flauta en Roma. La familia vivía en la Ciudad del Vaticano, y su papá trabajaba en la casa papal.

Este lunes 9 de enero, casi 40 años después, las autoridades han reabierto la investigación del caso, así lo informó el Vaticano a la prensa.

Cabe destacar que el hermano mayor de Emanuela, Pietro, ha solicitado una respuesta durante todo este tiempo, incluso con manifestaciones.

“Mucha gente me dice: olvídalo, disfruta tu vida, no pienses más sobre eso”, declaró en 2019 cuando se reabrieron las tumbas. “Pero no puedo. No podré estar en paz hasta que sea resuelto”, dijo el hombre.

La agencia de noticias Adnkronos, dijo que el fiscal del Vaticano, Alessandro Diddi, aseguró que “todos los archivos, documentos, informes, información y testimonios” relacionados con el caso serían reexaminados para “no dejar piedra sin remover”.