Cada vez que la planta de energía nuclear de Springfield, propiedad del  siniestro e insectiforme Señor Burns,  aparece en escena, se escucha el graznido de un cuervo.

Para el creador de Los Simpson, Matt Groening, el centro nuclear de la ciudad en la que viven Homero y su prole representa algo oscuro o que al menos huele a muerte.

En cambio, para el alcalde del puerto de San Antonio, Omar Vera, la posibilidad  de construir una central nuclear allí, como se planteó en un informe del Colegio de Ingenieros, resulta "una propuesta interesante".

"Estoy abierto a esta idea, entre otras muchas alternativas que existen para generar energía. Estamos abiertos a analizar la idea", dijo el edil, que por ningún motivo se reconoce  cercano al Sr. Burns de la serie gringa.

"No me identifico para nada con el Señor Burns (ríe). Yo no soy dueño de nada. Sólo soy un instrumento para generar mejores condiciones de vida para los sanantoninos", verseó.

Hizo un llamado a la "prudencia y la "calma", porque le pondrán oreja a todas las propuestas, dijo.

R.H.M.