Los fumetas europeos descubrieron la última moda de las drogas. Resulta que ahora andan en los jardines públicos o del vecino, buscan esa flor decorativa, bien famosa entre las abuelitas: la hortensia.

¿Y para qué? Resulta que la buscan para secar las hojitas y los pétalos, después enrolarlos, mezclarlos con tabaco y fumarlos para quedar re locos.

Según diversos blogs que han surgido al respecto, el fumar esta plantita produciría efectos alucinógenos y una sensación cuática, que cualquier fanático de Bob Marley quisiera vivir. Pero lo cierto es que estos cabros no son consientes del daño. 

La nueva moda preocupa a las autoridades, no sólo en Europa, si no en todo el mundo. Esto porque la hortensia es una planta muy común, y su flor es usada para decorar jardines, incluso plazas públicas.

Pero más que eso, capos en toxicología descubrieron que quemar esta linda flor puede ser muy dañino para la salud. Estudios publicados en la revista alemana Pharmazeutische Zeitung dicen que la combustión de las hojitas libera cianuro de hidrógeno, usado por los nazis para ejecuciones masivas.

Esta sustancia es nociva para el cuerpo humano, porque provoca daños cerebrales y otras lesiones nerviosas. También, mientras el que la fuma ve elefantes rosados, podría sufrir problemas gastrointestinales, mareos e incluso serios daños al corazón. 

El consumo de esta nueva droga puede causar incluso la muerte. Así que estos drogos europeos no la están haciendo de oro y podrían terminar tiesos, pero para siempre.