Como ya se viene Halloween, habría que decir que los niños del Campanil sintieron algo así como el tridente de Don Santa pinchándoles el popó. Un olor a azufre terreible, porque en Antofa el Puma se comía a Melipilla y esa victoria por un rato condenaba a los penquistas a irse de una al descenso, a dos fechas de que se acabe la primera fase.

Pero como en las películas, los mateos de la "U" de Conce conquistaron a la mina rica con el último calugazo. Rangers, como siempre, había noqueado con dos puñetazos del eterno Cellerino, pero en el último segundo y tras un contragolpe letal el "Diablo" Órdenes se llevó a la VIII Región los puntos de oro.