Sólo los desesperados gritos de auxilio que escucharon el dueño de una churrasquería de Recoleta y su señora, desde el interior del local, permitieron que un perico con nutrido prontuario por choreos, recibiera ayuda de urgencia para poder zafarse de la chimenea del establecimiento, en la cual se encontraba atascado.

"¡Ayúdenme, ayúdenme, que estoy atrapado!...". Esta fue la tremenda sorpresita que se llevó el comerciante Eliseo Bahamondes, cuando a eso de las 17 horas de ayer entró junto a su patrona a la churrasquería ubicada en avenida Einstein 629 y escucharon unos gritos desesperados provenientes de la cocina.

De acuerdo a Carabineros, se trataba de Jorge Andrés Llanos Arenas (35), un "ingenioso" malandra que no encontró nada mejor que meterse por la chimenea al local con la aparente finalidad de intentar un robo.

Según los policías y funcionarios de seguridad de la comuna, Llanos Arenas es delincuente habitual y ya había estado varias veces precioso por robo.

Según informaron, el abnegado hampón se lanzó durante la madrugada del sábado por el angosto espacio de la campana del local, pero quedó atrapado entre los metales junto al rico olor a fritangas.

"Vine a abrir el local para dejar las cosas del lunes y me encontré con una persona pidiendo auxilio. Se había metido por la campana", relató el dueño del local.

Cuando el perico escuchó llegar a los dueños empezó con el griterío para ser rescatado de la chimenea.

Una vez liberado de la chimenea por personal de Bomberos y Carabineros, se constató que el frustrado Papá Noel tenía varias quemaduras en su dorso producto del roce. Se fue de una tras las rejas a la espera de su formalización.