Tras la vibrante victoria de la Roja frente a Portugal, un emocionado Juan Antonio Pizzi sacó el habla pa' llenar de flores a sus pupilos. Lejos de desmerecer al rival, el estratega che se refirió al nivel de juego de la Copa Confederaciones. "Estuvo muy díficil. Estuvo muy peleado. Todos los equipos son de primerísimo nivel", la tiró, de entradita.

Con lágrimas en sus ojos, el deté aseguró que la clave del triunfo pasó por el ñeque de sus dirigidos. "Se ganó con un corazón que excede a lo que uno ve normalmente en los futbolistas. Estamos muy contentos. Vinimos a intentar jugar esta final. Por suerte la conseguimos. En un partido muy parejo con actuaciones destacadas", agregó.

Sobre Claudio Bravo, terminó de tirar la pérgola: "El arquero nuestro estuvo impresionante".

LA FÓRMULA GANADORA

Según reconoció Pizzi, la fórmula pa' superar desafíos tan cototos como enfrentar a los campeones de Europa, CR7 o lo que venga, es clarita: "La única forma en que podemos competir es estando al límite. Lo que no podemos bajar  ni un poquito es nuestra intensidad, nuestra concentración y esfuerzo, porque o sino nos puede ganar cualquiera".