Una gran pérdida sufrió el chef Carlo von Mühlenbrock ayer, luego de que su primo, el parapentista nacional Eitel von Mühlenbrock (44), perdiera la vida en el XII Campeonato Mundial de Parapente, celebrado en España.

Von Mühlenbrock se enteró por un llamado telefónico desde España del fallecimiento de Eitel y de inmediato se le vino a la mente la última vez que estuvieron juntos.

Fue el viernes pasado, en el restaurant "Osadía", donde ambos festajaron su clasificación al XII Campeonato Mundial de parapente, inaugurado el pasado domingo en el municipio de Piedrahíta, provincia de Ávila.

"Estábamos celebrando porque iba auspiciado para la competencia. Me comentó que se sentía muy preparado. Fue un gran deportista y es una pena lo que nos pasó", contó su primo cocinero.

Agregó que "todo esto es muy fuerte, porque a él le iba muy bien, le dio muchas alegrías al deporte y a nuestra familia", recordó Carlo.

El dramático accidente ocurrió a las cuatro de la tarde, hora de España. Según el diario El País, Eitel cayó en un descampado junto a la carretera, luego de perder el control de su parapente. Un testigo llamó a la Guardia Civil y contó que el deportista nacional estaba inconsciente. Cuando los rescatistas llegaron al lugar, el piloto ya había fallecido.

Dos horas antes y en similares circunstancias había perdido la vida el deportista argentino Francisco Vargas (50).

Eitel vivía en Iquique y presidía la Asociación de Vuelo Libre Zona Norte desde 2007. Era campeón nacional de parapente y empresario de la Zona Franca.

Patricia Rojo, secretaria de la Asociación, contó que el deportista "era técnico en seguridad y siempre tomaba todas las precauciones. Era estricto, disciplinado, amante de sus dos hijos y practicaba no sólo parapente, sino buceo y ciclismo. No entendemos cómo pudo ocurrir esto".

La Asociación de Vuelo realizará una vigilia y oración a la espera de que sus restos sean repatriados a Chile.