Sacaron puntaje para estudiar hasta  física cuántica, pero cinco chiquillas que sobresalieron en la PSU optaron por quemarse las pestañas  con el sólo objetivo de devolverle la mano a la sociedad y preparar al futuro de Chile.

Magdalena Edwards tiene 18 pepitas y desde siempre tuvo claro lo que quería estudiar. "Mi mamá es profesora y siempre estuve rodeada de maestros. Me encanta enseñar", verseó la peloláis egresada del Colegio Nazareth.

Aclaró que "esta es un área que se ha desprestigiado, y si yo pude mejorar en el colegio, por qué no poder ayudar a otros".

La Magda, puntaje nacional en matemáticas (850), estudiará Licenciatura en matemática y luego la pedagogía, en la Universidad Católica. "Mis amigos no entienden que haya optado por esto, pero mis papás me apoyan", remachó.

MISMOS PASOS

Las otras cuatro chiquillas que integran el lote comparten los mismos intereses que Magdalena. Y todas quieren estudiar en la UC.

Macarena Paredes, de 17 añitos, salió del Carmela Carvajal. Con 651 puntos ponderados, optó por seguir el legado de Pitágoras en la UC. "Quiero cambiar la forma de enseñar las matemáticas, sobre todo en los colegios municipales".

Trinidad Purcell, de 18 años, siempre fue matea. Salió con promedio 6.5 del colegio San Anselmo de Chicureo. Ponderó 703 pepones para Pedagogía Básica. "Me encantan los niños  y creo que enseñarles será mi forma de aportar al país".

Maca Canessa esperó tres años para encontrar su vocación. Cursando el sexto semestre de Antropología en la Universidad de Chile, decidió cambiarlo todo por las salas de clases. Dio nuevamente la PSU, ponderó  735 puntos, con los que entrará a Pedagogía Básica.

María Luisa Tornero es alumna de excelencia. Salió con un 6.8 del Huelén y participó en varios proyectos sociales. Sacó 758 puntos y quiere estudiar Pedagogía Básica.

¡MERCADO SE HACE RECHUPETE A SECRETARIAS Y CONTADORES!

La gran mayoría de los que rindieron la PSU no sacó puntaje nacional. Mucho menos les alcanzó para alcanzar a postular a una universidad que esté en el selecto grupo del Consejo de Rectores.

Pero aunque los jóvenes estudiantes no saquen ni 300 puntos, el futuro laboral no está perdido.

Un estudio realizado por  Laborum  sobre las ofertas de trabajo en 2009, señala que este año las pegas para técnicos fueron grito y plata, siendo incluso más rentables que muchas "profesionales".

CRISIS

Uno de los mayores factores para encontrar laburo en el último año fue la crisis. Debido a la hecatombe financiera, las pegas más requeridas se fueron al mundo del control y la gestión.

Al otro lado de la vereda terminaron las carreras relacionadas con la computación y la informática,  que tuvieron súper pocas ofertas.

Según el análisis, los puestos más requeridos se fueron para el área de administración de empresas, contabilidad, secretariado y recursos humanos.

En cuanto a la educación universitaria, este año se pelearon a todos los ingenieros comerciales, civiles industriales y contadores auditores. Ojo, que el año pasado ganaron las mismas carreras.

ANIMADORES 3D LA CORTAN CON CINCEL EN EL MERCADO EMERGENTE DE LA ÑOÑERÍA

Hasta hace algunos años estudiar Derecho, Medicina o Periodismo garantizaban fama, plata y hartos pololeos, pero ahora el asunto cambió radicalmente.

En la sexta Feria de Postulación y Matrícula de la Educación Superior, que se realiza en la Estación Mapocho, dos carreras se llevaron los aplausos y el interés de los más pillos.

Entre las nuevas pegas del mercado está la de "Animación en 3D", grito y plata entre los ñoños de Europa y  Estados Unidos. La Universidad Gabriela Mistral es la pionera en abrir la onda tecnológica y, a juzgar por la cara que ponían los preguntones que llegaron al stand, será  un golazo este 2010.

Marcos Gutiérrez, recién egresado del colegio y con una ponderación sobre los 600 puntetes, confesó que quiere puro volverse animador.

"Tengo claro que el campo laboral no es muy amplio en Chile, pero las oportunidades de obtener un trabajo en el extranjero son hartas", comentó el muchacho, lleno de esperanzas.

HUASOS MODERNOS

Otro de los rubros nuevos que más llamó la atención de la cabrería fue la "Ingeniería en agronegocios", mezcla perfecta entre un huaso y un calculín.

La carrera lleva varios años en nuestro país y, según los valientes que se atrevieron a estudiarla, es llegar y ganar platita, sobre todo porque hay un montón de productos hechos en nuestra tierra que son apetecidos por todo el mundo.

El ex chico reality del cocido "Amor Ciego", Stefano Franzini, abandonó la Ingeniería Comercial para volcarse al estudio del agro. "Es una carrera que permite desarrollar en los mercados internacionales los productos chilenos más solicitados y de esta manera potenciarlos".

"La plata ganada puede ser mucha más que en carreras tradicionales", remachó.

Por Karen Punaro M.