La tarde del martes un lolo de 16 años conocido como “el Pato” tomó un taxi en la intersección de Teniente Cruz con General Bonilla, en Lo Prado, y no pudo llegar a su destino porque terminó en la Segunda Comisaría de Santiago.

El conductor del auto de alquiler se espantó porque el muchacho no tenía plata para pagar la carrera y lo dejó donde los carabineros, que se fueron de espalda el loro cuando descubrieron lo que llevaba.

La casa de donde salió el cabro queda en el pasaje Río Isluga. Ahí vive en una humilde vivienda una familia que lo conoció en el colegio Pablo Neruda, cuando habitaban en Colina, en donde el Pato sigue residiendo.

Aún así, el lolo dio la dirección de sus amigos cuando la policía descubrió en su poder un lanza cohete modelo M136 AT4 calibre 84 milímetros, 35 cartuchos para fusil calibre 5.56 milímetros, tres cargadores para fusil sin munición y dos granadas calibre 40 milímetros.

EL PAQUETE

La vivienda de Lo Prado fue allanada por carabineros y nada descubrieron,  porque efectivamente el Pato no vive ahí, sino que pasó de visita y, según la dueña de casa, apenas una vez había pasado la noche con ellos.

La mujer, que no quiso dar su nombre, contó que el Pato pasó por su casa la tarde del martes y al verlo tan flaquito lo invitó a comer, pero él le dijo que no podía quedarse porque tenía que hacer un trabajito y se limitó a tomarse un vaso con agua.

“Estuvo como diez minutos en la casa, andaba con un paquete largo, como esos que se usan para guardar árboles de pascua y yo le pregunté si se creía el Viejo Pascuero; él dijo que llevaba un florero de cuicos que iba a vender en un negocio que tenía con un tío de Los Andes. Me pidió un scotch para engüinchar el florero, porque el paquete se le estaba desarmando, y le pedí que me lo mostrara y me dijo que no”, recordó la mujer.

“Cuando se fue le dije: cuidado con el florero, no se te vaya a quebrar”, agregó.

Los malos pasos en que andaría el Pato podrían deberse a lo penca que lo ha tratado la vida. Su mamá, cuando era chico, habría tenido la intención de entregarlo a un hogar de menores y ahora el muchacho pasa de casa en casa. Y además, con sólo 16 años es papá de una niña chica.

Aún así, la mamá de su ex compañero del colegio de Colina lo considera un buen cabro. “Nunca lo he visto preso, no creo que sea culpable, él no anda con ese tipo de cosas”, aseguró.

LIBRE COMO EL VIENTO

A las 11.30 fue formalizado “el Pato” y el Juez Patricio Souza le impidió a la prensa presenciar la audiencia pública porque es menor de edad.

A la salida, el fiscal adjunto Jorge Marín Vega contó que el muchacho fue acusado de porte ilegal de arma de uso bélico, y que había pedido su internación provisoria en un centro del Sename, pero el tribunal determinó que el Rambo de macetero deberá esperar los 120 días que dure la investigación bajo arresto domiciliario total, aunque tal como lo hizo ante los carabineros, es posible que haya dado una dirección falsa

Sobre los motivos que lo llevaron a portar armas de un poder destructivo tan grande, el fiscal contó que se investigará porque el “Pato” no dijo ni pío y se echó el pollo por una salida lateral del Centro de Justicia.

De las armas, aclaró que el lanza cohetes de fabricación sueca era desechable y ya había sido usado, mientras que investigan si las granadas estaban operativas.