El Presidente Gabriel Boric asistió a la exhibición de un documental en París, sobre la memoria de los fraco-chilenos, mostrándose emocionado con la actividad que se llevó a cabo en conmemoración de los 50 años del Golpe de Estado en Chile.

Durante su discurso, el primer mandatario pidió, en nombre de Chile, perdón a los exiliados que tuvieron que abandonar el país tras el golpe y buscaron asilo en Francia. En esa línea, Boric lamentó que los exiliados tuviesen que “cortar las raíces con nuestro país”.

La máxima autoridad de Chile también comprometió su Gobierno a continuar buscando a los detenidos desaparecidos y a buscar la verdad y justicia para las familias afectadas.

“Hoy estamos acá y nuestro Gobierno es o busca ser una síntesis generacional. Nuestro canciller Alberto Van Klaveren estaba vivo en esa época y tenía 20 y algo años, y, sin embargo, los otros tres ministros me atrevo a decir que no habían nacido. Yo soy el más viejo de todos, tengo 36 años. Que no tengamos los recuerdos de esas horas terribles nos hace sentirnos íntimamente conectados con ustedes”, explicó el presidente.

“Nuestra generación no estaría dónde está si no fuera por ustedes, su lucha no ha sido en vano”, recalcó Gabriel Boric.

En su discurso, el presidente también rechazó la idea de imponer el olvido y enfatizó la necesidad de recordar y aprender de la historia para no repetir los errores del pasado. Por último, hizo un llamado transversal para conmemorar los 50 años del Golpe de Estado, buscando la participación de todas las fuerzas políticas y generaciones en este importante acontecimiento histórico.

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