Una noche de furia tuvo un individuo que durante la madrugada de ayer ingresó al interior del Templo Votivo de Maipú, y destruyó todo lo que se le cruzó en su camino.

Se trata de un sujeto de aproximadamente 36 años, con algún tipo de trastorno mental, y que vive en situación de calle. Según explicó la policía, a eso de las 8.30 de la mañana saltó un muro perimetral del santuario ubicado en calle Carmen, y premunido de un palo rompió varios objetos.

"Un llamado de parte del sacerdote del lugar a Carabineros alertó que al llegar a sus labores en el templo se encontró con una persona en situación de calle, la cual había provocado diversos daños en ventanales y figuras religiosas", señaló el capitán Andrés Morales de la 25° comisaría de Maipú.

Se trata de 40 estatuas de diversos tamaños, alrededor de 7 ventanales y parte del techo del templo, daños que fueron avaluados en más de 4 millones de pesos.

"No habíamos actuado nada más que avisando a Carabineros y a seguridad ciudadana para ver si nos prestaban apoyo, más para que lo pudieran ubicar en algún lugar, pero anoche se quedó durmiendo a los pies de la virgen y tomando un palo empezó a destrozar todos los vidrios", agregó Verónica Barra, administradora del recinto católico.

"Al ser abordado y detenido mencionó incoherencias de carácter religioso, por lo cual fue conducido a la comisaría. Por orden del fiscal de turno pasó a control de detención", indicó el oficial Morales.

Al momento de ser controlado por los policías el hombre señaló que era Jesucristo, y que estaba enojado con su Santo Padre, y que por dicha razón había destrozado el lugar.

El sujeto, identificado con las iniciales J.P.R. fue formalizado por daños en lugar no habitado, quedando con medidas cautelares menores, ya que no tiene antecedentes penales.