El ahora precandidato presidencial del PPD, Francisco Vidal, realizó una profunda reflexión sobre lo que fueron los gobiernos de la Concertación.

Vidal fue ministro tanto de Ricardo Lagos, como de Michelle Bachelet. Por lo mismo, pidió perdón por las falencias que tuvieron las administraciones en las que él participó, en conversación con el alcalde de Lo Prado, Maximiliano Ríos, durante el programa Hablemos en Directo.

Sobre el estallido social de octubre de 2019, aseguró que este se veía venir "porque si bien en el país creció como nunca la riqueza por 5 veces y se redujo la pobreza en un 60%, sin embargo, la desigualdad se mejoró en el margen, pero se mantiene la brecha de desigualdad en territorio, en salario, en género entre hombre y mujer, entre pueblos originarios y huincas".

"Así como en la vida de pareja, matrimonios, padre e hijos, amigos y en el barrio, la confianza se gana a través del tiempo y se pierde en un minuto y la política ha perdido la confianza de los vecinos; porque se miente mucho, se promete mucho sin poder cumplir lo que se promete. Porque la política se demora mucho en resolver los problemas más inmediatos, más la picantería que rodea al mundo de la política, el joderse al otro", explicó.

Lo bueno y lo malo

Ante esto Vidal, que hoy intenta volver a La Moneda, aunque esta vez al sillón presidencial, indicó lo que él cree fueron los grandes legados de la Concertación, tanto en lo positivo como en lo negativo.

"Yo estuve 8 años como ministro en La Moneda. Hicimos cosas muy buenas como el Auge, el fin de la censura, el aborto terapéutico en tres causales, entre otras… pero hicimos unos errores brutales; el CAE por ejemplo. ¿En qué minuto a alguien se le ocurrió que para darles crédito a los estudiantes había que hacerlo a través de los bancos y con una tasa de interés del 6% anual? La peor política pública en muchos años, el Transantiago. Hay errores. Lo importante es decir cometimos errores, y pedir perdón. No se trata sólo de decir nos equivocamos. La clave es la verdad", sinceró.