Como si fuesen cirujanos, pero usando un abrelatas en vez de un filoso bisturí, los sabuesos anticochiná de la PDI dieron con un trío de narcos que ocupaban dos camionetas 4x4 para mover varios kilos de mandanga.

Los traficantes, identificados como Jéremy Véliz, Gabriel Castro y Oliver Ramos, se pegaron el azote desde Alto Hospicio abordo de dos Mitsubishi rojas, idénticas a las que usan en las faenas mineras, ocultando entre el metal más de 41 kilos de “caspa” de alta pureza y 104 kilates de coca base.

“La mercancía venía oculta en los estanques de petróleo, los que estaban acondicionados con una doble cavidad. En estas cavidades venía oculta el clorhidrato de cocaína. Igual al interior del vehículo y en el pickup venía más droga”, descaseteó el comisario Álex Ahumada de la Brigada Antinarcóticos de la PDI.

Luego de una cotota investigación, los polis le siguieron el paso a esta banda, la que atraparon al llegar al peaje de Pichidangui, en la región de Coquimbo. Inmediatamente  se procedió a desarmar las joyas, sacando de circulación la droga equivalente a más de 1 millón 600 mil dosis, avaluada en 2.375 millones de pesos.

“Los detenidos cumplen la función de ser los transportistas de esta cantidad importante de droga que posteriormente iba a ser entregada y comercializada en la zona sur de la capital”, agregó Jorge Carmona, fiscal adjunto de la Fiscalía Metropolitana Sur.

Operación

Los sabuesos al final filetearon el auto en el cuartel antinárcoticos de la PDI en Santiago. Tuvieron que usar cortafierros especiales para desmenuzar ambas máquinas, igualito que al abrir una lata de jurel, encontrando varios “ladrillos” en el pickup, en el suelo de la 4x4, las puertas y el mismo estanque de petróleo, el que tenía un compartimento especial en su interior.

Los tres detenidos pasaron a control de detención por pasarse por “donde termina la espalda” la ley 20.000 de drogas, pero como no tenían yayitas policiales anteriores a lo más podrían pasar 5 calendarios a la sombra. Mientras tanto se fueron a la jaula por los 75 días que dure la investigación.