Como el tiempo es un bien escaso, pero el cuerpo exige satisfacer a como dé lugar sus necesidades básicas, léase placeres de la carne, el empresario ariqueño Fernando Gómez Calizaya decidió matar dos pájaros de un tiro y creó el súper novedoso motel express.

El nidito de amor está pensado para los amantes sin tiempo para preámbulos romanticones, sino que buscan ir altiro a la papa. La dinámica es simple: Los tortolitos llegan en su auto hasta la puerta del palacete, hacen un cambio de luces al portero, pagan una lucrecia por hora e ingresan a un estacionamiento individual donde una cortina mantiene la privacidad de los fogosos actos que se desarrollarán al interior del tocomocho.

El motel para cuatro ruedas se llama "Arrechón Express", y desde su inauguración ha sido grito y plata, porque todas las noches se llena, e incluso hay fila para entrar. Los asistentes codician la discreción que entrega el ardiente estacionamiento techado, que permite transformar al noble automóvil en un lujurioso catre con ruedas.

ECONÓMICA

"Es una excelente idea… y muy económica", parló un perico que salió más contento de lo que entró. "Cada día le tengo más cariño a mi auto", declaró otro, que le mandó saludos a su señora.

"En un mirador, en realidad, uno no mira nada. Aquí es mucho más seguro y piola", verseó una clienta que cacha harto... del tema.

El recinto parejero se encuentra al interior de un estacionamiento tradicional, que ofrece servicio de limpieza y lavado de alfombra. Al fondo, tras un portón de lata, se ubican 12 cubículos individuales enumerados con los signos zodiacales: "Virgo" para los debutantes, "Tauro" para los rudos, o "Capricornio" para los que andan poniendo los cuernos.

El "Arrechón", palabra aymara que alude a los califas, curiosamente queda en la avenida Azolas, y su dueño piensa arrendar autos a 5 lucas para los que lleguen a pata. Un verdadero filántropo. "Yo me inspiré en Javier Margas, un empresario modelo", dijo el visionario, quien también posee un motel tradicional.

- Oiga gurú, ¿Tiene clientes frecuentes?

- Los taxistas son los más "fieles" visitantes.

- ¿Y ofrece servicio de pollito al capó?

- Por el momento no, pero el negocio está tan prendido que estoy abierto a cualquier innovación.

- ¿Y qué opina la patrona, ah?

- Está feliz. Regularmente nos dedicamos a hacer el control de calidad de nuestra empresa.

Pedro Pablo Robledo.