Mientras la temporada llega a su fin en Europa, a Arturo Vidal no le faltan interesados para contar con sus servicios. No sólo en Europa, ya que la fama del "Rey" cruza diligentemente el Atlántico para poner su nombre en la millonaria Major League Soccer de Estados Unidos.

Bastó que el de San Joaquín hiciera un pequeño gesto en su celular para que las especulaciones encendieran el mercado. A finales de abril, el medio gringo Telemundo aseguró en sus redes sociales que el Inter Miami FC tenía en sus planes al "Celia".

Una noticia que gustó al ex colocolino, quien mecánicamente le prodigó un "like" que trajo consecuencias al toque. Y aunque el futbolista bajó de inmediato su gesto digital -a instancia de sus asesores- quien sí se percató de la declaración de intenciones fue David Beckham, uno de los dueños del equipo.

Así comentaron a La Cuarta cercanos a Vidal. Y es que el ex puntero británico no dudó en comunicarse con el chileno para conocer de su boca las verdaderas intenciones. En una grata charla, el bicampeón de América le expuso las condiciones de su contrato con Barza, que termina en junio de 2021, pero de ninguna manera cerró completamente la puerta a la opción de marcharse a Florida en el futuro.

"Sobre todo por el clima y las ventajas que significan jugar en esa ciudad del sur del país del norte, en una liga emergente, con mucha proyección internacional", dicen en el entorno del ex Juventus.

Futuro incierto de Vidal

En lo inmediato, lo único claro en el panorama del "22" culé es la duración de su contrato con el club catalán. Eso sí, el fin de semana pasado, el diario Tuttosport publicó que el técnico de Inter, Antonio Conte, le exigió a los dirigentes neroazzurri que hiciera un esfuerzo por su ex pupilo.

Sin embargo, las mismas fuentes confirman que "Vidal no quiere quedarse tanto tiempo en Europa, en un contrato que lo podría ligar hasta tres temporadas más en un club. Quiere estar más cerca de su familia, aunque si llega una oferta millonaria por menos años, tampoco es descartable".

Y es que a sus 33 años, al "Rey" también lo mueven otras motivaciones. Por eso, si Barcelona no extiende su contrato, tampoco es el fin del mundo.

"Una de los grandes desafíos de Arturo Vidal es jugar en Flamengo de Brasil. Le alucina el hecho de jugar en un estadio Maracaná lleno. Y el gran responsable de ese deseo es su amigo Rafinha, con quien coincidió en Bayern Münich y quien se convirtió en uno de sus más cercanos", confirman en el "planeta" del ex Leverkusen.