A sus 44 veranos, Francisco López está como tuna y ahora corriendo en Syde by Syde, se tiene fe para revalidar la corona del Dakar ganada este año.

Por lo mismo, el inmortal "Chaleco" no le teme a las arenas del desierto de Arabia Saudita, país que por primera vez albergará la fiesta tuerca. Eso sí, la letra chica trae hartas novedades, ya que en suelo islámico hay una larga lista de prohibiciones de su cultura.

Tome nota: entre las restricciones más llamativas están las muestras de afectos públicas como los abrazos, el comer carne de cerdo, mostrar los tatuajes y, para los animosos, calentar motores viendo pornografía. Esa onda...

Pero a la hora de defender los colores de la patria, nuestro eterno piloto aperra igual. Y aunque sabe que el incumplimiento de estas reglas puede ser penado hasta con cárcel, irá con toda la fe de darle una alegría al pueblo chileno.

"Esta carrera ayuda mucho a levantar a nuestra gente, ese es el objetivo. Me encanta el desierto, lo entrego todo y voy feliz a esta aventura", dice, acelerando a fondo con La Cuarta.

- ¿Le asusta tanta prohibición?

Hay que amoldarse al país. Que haya cárcel y penas de muerte, con eso no se juega. Lo del tatuaje no lo sabía, habrá que usar pantalones largos nomás.

- ¿Le complica no comer cerdo o cero pornografía?

No tengo esa necesidad, ni en Santiago veo porno, jajá. Son radicales, pero si gano, igual celebro con un abrazo.