El mundo del fútbol está lleno de casos de rebeldía, pero el de Javier Margas es una historia particular. El defensor chileno tuvo una relación de amor-odio con el West Ham United, que terminó de forma abrupta y para siempre, dejando dudas que hasta el día de hoy no se han aclarado.

En 1998, el zaguero de la UC apareció en la nómina de seleccionado nacionales para jugar en el Mundial de Francia, donde La Roja tuvo una gran actuación durante la fase de grupos, clasificando a los octavos de final. Uno de los puntos altos de la escuadra nacional era Margas, quien en el verano europeo de aquel año recibió una oferta de la prestigiosa Premier League.

El defensa no era una joven promesa del fútbol chileno, ya que había construido su carrera en Colo Colo, siendo parte del plantel campeón de la Copa Libertadores. Tras alcanzar la “gloria eterna”, llegó a jugar el fútbol de México, donde defendió la camiseta del América. Pero ya a sus 29 años había vuelto al país para jugar en Universidad Católica cuando ocurrió la Copa del Mundo. El entrenador del conjunto británico, Harry Redknapp, lo vio jugar en la cita global y quedó maravillado. “Cuando lo vi jugar en la Copa del Mundo fue fantástico”, señaló años más tarde.

Un sueño amargo

Jugar en la liga más prestigiosa de Inglaterra sigue siendo un sueño para cualquier jugador chileno, y él se convirtió en el primer representante nacional en vestir la camiseta de los hammers, mucho antes de que pasaran por el elenco Luis Jiménez y Manuel Pellegrini.

Le dieron un auto, una casa, se impregnó de los colores de la institución (literal). Margas llegó a un entrenamiento con el pelo teñido azul y burdeo, tal como se luce en escudo del conjunto británico, mismo que besó cuando hizo su único gol en la Premier.

Pero no todo era color de rosas, ya que por otro lado estaba teniendo problemas para pelear por la titularidad. Entre lesiones graves que estaba sufriendo, además coincidió con un plantel donde destacaban nombres importantes de la época, goleadores como Davor Suker y el italiano Paolo di Canio.

Además, llegó a coincidir con jóvenes promesas que daban sus primeros pasos en el profesionalismo, pero que con los años sus nombres quedarían marcados en el fútbol inglés como Río Ferdinand y Frank Lampard.

Fueron casi tres años los que pasó Margas en el West Ham, tiempo en el que jugó un total de 18 partidos en la Premier League, además otros tres en la Copa de la UEFA y uno en la EFL Cup. Su paso por el conjunto terminó de la forma más abrupta posible, pero sin siquiera conversar con la dirigencia.

Se fugó por la ventana

En 2001, Javier Margas ya había dado declaraciones a la prensa señalando su interés en regresar a Colo Colo, sin embargo aún tenía contrato en Inglaterra, y las cosas no estaban resultado como quería, por lo que decidió volver a Chile sin avisarle a la dirigencia, ni llamar la atención del lugar en el que se estaba quedando.

En su arribo a Santiago no quiso conversar con los medios y nunca se refirió al respecto. Tuvieron que pasar 16 años para que surgiera una declaración “oficial” sobre qué fue lo que motivó al defensor a dejar todo tirado, sin siquiera presentarse ante el cuerpo técnico y huyendo a la mala. Fue el DT, Harry Redknapp, quien reveló al diario Mirror que el exseleccionado nacional se arrancó por una ventana del hotel, y fueron motivos familiares los que lo llevaron a tomar la decisión.

“Su señora odiaba estar acá, ella tenía una familia muy grande en Chile, por eso lloraba”, señaló el estratega. “Un día, él no llegó a un entrenamiento y corrió el rumor en el camarín de que su esposa había vuelto a Chile y que él estaba alojando en el Swallow Hotel”, comentó el extécnico del West Ham.

Como no le contestaba las llamadas, el adiestrador salió en su búsqueda al lugar donde se hospedaba: “Fuimos a verlo de inmediato porque nos dijeron que podría volverse a casa y nosotros dijimos ‘¡no puede, tiene contrato aquí, nosotros lo compramos!’”.

Redknapp pidió al encargado que abriera la puerta de la habitación, pero se encontró el lugar vacío. “Llegué ahí y había dejado la mitad de sus cosas en la pieza, la ventana estaba abierta. Era el primer piso, así que obvio que tomó lo que necesitaba, saltó por la ventana y se fue caminando. Nunca supimos más sobre él. Volvió a Chile y ese fue el final de su carrera en West Ham”, recordó el ex técnico de los hammers.

Un amargo final para la gran carrera de Javier Margas, quien nunca pudo retomar el fútbol, pese a que lo intentó. Sus problemas contractuales con el West Ham incluso impidieron que pudiera volver a jugar en Colo Colo, cuando se ofreció para jugar gratis en el periodo de la quiebra del Cacique.