Por Bastián Escalona AmpueroEl último equipo chileno en disputar la final de la Libertadores: Universidad Católica en 1993
Ya han pasado más de 30 años desde que un conjunto nacional llegó hasta la instancia decisiva.

Este sábado se juega la final de la Copa Libertadores, y como ha sido la tónica en esta competición durante los últimos años, los equipos que se enfrentan en esta instancia son brasileños. El nivel de los equipos brazucas ha sido imposible de igualar, dejando en el camino a los clubes del resto del continente.
Ya han pasado más de 30 años desde que un equipo chileno llegó hasta la instancia decisiva en el torneo más importante de América, cuando en 1993 la Universidad Católica de la mano de Ignacio Prieto se codeó con los gigantes de América.
La década de los 90’ fue probablemente el mejor momento para los equipos chilenos, con una liga que tenía equipos peleando por los títulos continentales. Los cruzados estuvieron cerca de la gloria eterna, pero fueron superados por el Sao Paulo de Telé Santana, quienes pasaron por encima del equipo precordillerano.
Aquella edición, la Copa Libertadores tenía un formato diferente al actual, una fase de grupos en la que coincidían planteles de solo dos países, y una final ida y vuelta, entre algunos cambios que ha tenido el certamen.

Cerca de la gloria eterna
La primera ronda de la competencia, la UC la pasó sin mayores dificultades, liderando el Grupo 2 con ocho unidades, tras ganarle a Cobreloa, Bolívar y San José de Bolivia, sellando su pase a los octavos de final.
A partir de esta llave hasta la semifinal, los cruzados tuvieron que definir como visitante. Su primer oponente fue Atlético Nacional, a quienes superaron por 2-0 en Santiago. Para el partido de vuelta, la Cato cayó por 2-1 en Medellín, pero el marcador final les permitió clasificar a la ronda siguiente.
Los cuartos de final fue la llave en la que menos sufrió la UC, ya que le ganaron en ambos partidos a Barcelona de Ecuador. En la ida, Juan Carlos Almada anotó un doblete para sellar el 3-1 en San Carlos. Para la vuelta en Guayaquil, Moto Romero marcó el único tanto que los metió entre los cuatro mejores planteles del continente.
Para la semifinal, se encontraron con América de Cali. En Santiago, los chilenos superaron por 1-0 a los cafeteros, una llave que quedó abierta y que se definiría en territorio colombiano.
El partido definitivo comenzó mal para Universidad Católica, ya que cuando transcurrían apenas 15 minutos, ya iban perdiendo por 2-0. En ese momento salió la épica del equipo de Ignacio Prieto, quienes sacaron adelante el partido pese a la adversidad. Cuando faltaba solo tres minutos para el pitazo final, Ricardo Lunari igualó el marcador para los cruzados, un resultado que los metía directo en la final.
Sin embargo, sufrieron hasta el último minuto, ya que en los 90’, el árbitro uruguayo Ernesto Filippi cobró penal para los dueños de casa, por falta de Mario Lepe sobre Antony De Ávila. Con la mística del campeón, el arquero Óscar Wirth atajó el lanzamiento y clasificó a la UC en la definición ante Sao Paulo.

Una final que se escapó de inmediato
Los brasileños llegaron la final de la Copa Libertadores como los favoritos, con un plantel que contaba con estrellas como Zetti, Raí, Palhinha, Cafú, Müller, Caté, entre otros. Además, venían de ser campeones del torneo en la edición anterior. Lo positivo para la UC era que por fin podrían definir el título en su casa, ya que el Estadio Nacional recibiría el partido de vuelta.
La final de ida se jugó el 19 de mayo de 1993 en el Estadio Morumbi de Sao Paulo. Los dueños de casa hicieron valer la localía y de inmediato impusieron su juego, marcando diferencia desde el primer momento.
Tras un frío comenzó, los goles empezaron a llegar, y prácticamente cada 10 minutos los brazucas comenzaron a anotar. El marcador final que la UC se llevó a Santiago fue un 5-1, por lo que la definición en Chile sería cuesta arriba.

Aquel 26 de mayo los cruzados recibieron a Sao Paulo con la ilusión intacta. Al salir a la cancha, los de la franja de inmediato empezaron a atacar generando chances claras hasta que llegaron los goles.
Ricardo Lunari sacó un remate desde fuera del área que llenó de esperanzas a los fanáticos de la Cato. Solo instante después un penal a favor de los cruzados permitió poner el 2-0 antes de los 15′. De ahí en adelante, el arco se cerró y no se hicieron más goles, aguando los sueños de levantar el título de la Libertadores, mientras que los brazucas alzaron la copa por segundo año consecutivo, un equipazo que en diciembre del mismo año vencieron al Milan en la Copa Intercontinental, en Japón.
Imperdibles
Lo último
hace 45 min
20:46
19:57
17:55
16:27
Lo más leído
1.
4.
5.
6.



















