El Liverpool conquistó su sexta Champions League tras vencer 2-0 al Tottenham. Los dirigidos por Klopp fueron superiores que volvieron a levantar la orejona en el Estadio Metropolitano de Madrid.

Los diablos rojos sanaron las heridas tras la final perdida el año pasado en Kiev contra el Real Madrid. La victoria la empezó a cimentar Mohamed Salad desde el minuto 2. El egipcio no perdonó desde el punto penal y anotó 1-0 iniciando el encuentro.

El segundo golpe llegó casi finalizando el partido. De contragolpe, el belga Divock Origi, verdugo del Barcelona en semifinales con tres goles, recibió en el área de los Spurs y con certero remate clavó el 2-0 definitorio.