Cuesta creer que haya algo mejor que salir campeón del mundo, pero existe esa opción: ser campeón y casarse con la mujer que amas.

Si a esa combinación se suma que tu amada es Pamela Anderson, el cuento de hadas que está viviendo Adil Rami, el defensa de 32 años que juega en el Olympique de Marsella, es perfecto.

Es que los casi 20 años de diferencia entre ambos (la modelo tiene 51) no son impedimento para que el amor fluya, por lo que después de levantar la copa de campeón se ha lucido al regalarle a la rubia un espectacular anillo de diamantes de Cartier, dejando claro que el compromiso va en serio.

Ayer Rami y sus compañeros campeones llegaron a París, donde fueron recibidos como héroes nacionales en las calles de la Ciudad de la Luz.

La hinchada estaba esperándolos en los Campos Eliseos, donde recorrieron en un bus ante una multitud que sobrepasó el millón de personas, según anunciaron las autoridades francesas.