Bombo Fica dejó la tendalada en el Festival del Huaso de Olmué. Sus chistes y tallas, todas cargados de actualidad, tuvieron el manso recibimiento entre el público, que lo despidió con la  tremenda ovación. Y pese a que el artista, que siempre viste de blanco, estaba medio desaparecido de la tevé, el público lo sigue recordando con caleta de cariño, y así lo demostró la noche del sábado en la segunda patita de la movida.

Apenas terminó su actuación, el chistologo habló con el diario pop acerca del cariño de su público y sobre su alejamiento de la pantalla chica.

-¿Cómo fue  este reencuentro con  la barra?

- Es que yo recorro harto mi país y hago bastantes show masivos,  claro que no tienen la promoción de Olmué, perotengo una buena llegada con el público, me siento seguido y querido.

-Igual anduviste medio desaparecido, no te hemos visto en tele ni nada…

- No es que yo me alejara, yo no voy a programas de televisión porque no puedo estar, mi trabajo no tiene cabida en la tele.

- ¿Y qué crees que hay que hacer pa' estar en la pantalla chica?

- Hoy hay que ponerse pechugas y comprenderán que no me las voy a poner, jajajá. Por lo tanto lo único que queda son este tipo de expresiones populares, abiertas, y perdonen la soberbia, pero no necesito de la tele para sobrevivir.

- ¿Entonces Olmué era tu escenario perfecto?

-Yo fui invitado y creo que no me equivoqué en aceptar,  porque hoy en día es difícil actuar en la tele. Te agarran la rutina y te la manosean, Kramer y Coco Legrand deben estar súper choreados con todo lo que les han repetido los chistes.

-¿Cómo te vas con la experiencia?

- Contento, hice un trabajo bien hecho, la gente escuchó y disfrutó de lo que yo mejor  sé hacer, que es el humor.

-¿Pero no hay ninguna posibilidad de volver a la tevé?

- Claro, si hoy no hay ningún programa de televisión donde ir, se acabaron los "Viva el lunes", los "De pé a pá", los "Noche de ronda", entonces no hay cabida, pa' estar en televisión tendría que ser opinólogo y empezar a hablar estupideces y a dejar mal a la gente y yo para eso no sirvo, sirvo para hacer reír.

Por Javiera Requena

Enviada Especial