A pesar de que jura que sus intenciones siempre fueron buenas, la maquilladora Melissa Murphy se quedó sin pega en la industria pornográfica de Estados Unidos acusada de filtrar en mala onda imágenes de las actrices porno sin un polvito en la cara.

La chiquilla se hizo conocida en el mundo entero cuando decidió utilizar su cuenta de Instagram para dar a conocer cómo lucían las mayores estrellas del porno antes y después de maquillarse.

Obvio que la acción causó malestar entre algunas actrices, especialmente en aquellas más perjudicadas. A tanto llegó el pataleo que los caporales del prono decidieron darle la PLR a Melisa por su poca probidad.