Hasta hace un par de semanas que Mariana Marino dejó de chalupear y logró poner sus patitas en fila luego del estrés y achaques post encierro de Mundos Opuestos.

Ahora anda de lo más radiante y ansiosa con su agenda copada, donde ya no cabe ni por siaca el nombre de Sebastián Roca, su ex fogoso amor de reality. "Tengo muchos proyectos, estoy por el momento con contrato en el Así Somos hasta fin de año, empezando la nueva temporada de Teatro en Chilevisión (este sábado), con otros pendientes en CHV que ojalá se concreten", dice. Como si fuera poco, Marianita hizo buenas migas con la productora que craneó las obras Los Sinvergüenza y Con Vergüenza, y tiene cupo seguro en un montaje junto a Carola Oliva, Ana María Gazmuri y Antonella Ríos que partirá este mes y tendrá funciones hasta febrero.

“La obra tendrá un toque de sensualidad, donde verán el destape de estas mujeres”, explica con su linda sonrisa de mujer completamente soltera.

Desde hace un mes la amigaza de Andrea Dellacasa dice no echar de menos compartir el colchón. Que ya no chacharea, ni ha sabido de su Roquita: “Después que terminamos hablamos, pero hoy no tenemos contacto y está bueno tener esa distancia, si no se te genera una confusión”.

- ¿Su recaída dices tú?

- Siempre con mis ex he tenido buenas relaciones después de un tiempo, en el fondo con ex parejas hablo por teléfono, pero uno no es amigo altiro, se da después de un tiempo que todo sana.

- Otro caso más de la maldición de los amores de reality, pocazos sobreviven.

- Es que cada uno buscó retomar su camino y darse cuenta qué era lo que quería. No tengo nada negativo que decir de él, pero a veces las personas se encuentran en momentos y comparten y todo fluye. Cuando alguien no es para vos, no es nada más.

- ¿Quién dio el chute?

- Yo soy la de tomar las decisiones, soy drástica. Tenía que tomar decisiones por muchas cosas en mi vida y hoy estoy tranquilísima, no siento que tenga pendientes.

- El pobre cabro llegó a llorar después de la PLR...

- Sebastián lo tomó bien, pero buscando que no fuera así, lo supo entender porque sabía que no estaba pasando un buen momento respecto a mi vida, mi salud, yo tuve que priorizar.

- Y, ¿estás pa’ otro encierro?

- Me llamaron de Pareja Perfecta, hasta incluso negocié, pero después me arrepentí.