La revista gringa "Allure" logró desenmascarar las mañas de Megan Fox, que no son nadita de comunes. Luego de un largo tiempo sin dar entrevistas la minoca accedió a realizar una sesión de fotos y parlar sobre la vida y sus proyectos.

La protagonista de "Transformers" confesó que no puede usar baños públicos o piletas de ningún tipo. "cuando tiras la cadena, todas las bacterias son liberadas en el aire. Poner mi boca donde millones de bocas han estado antes, conociendo la cantidad de bacterias que tú tienes en la boca 'uch'".

Megan dijo que como cocinera deja mucho que desear, pero por miedo y asquito. "Me muero de hambre antes de cocinarme. Creo que podría sobrevivir una semana sin comer". Mañocita ella, pero nosotros sólo queremos mirarla ¿o no?

¿POR QUÉ NO HABLA CON LOS MEDIOS?

Las revistas de farándula estadounidenses se han tenido que quedar con así manso cuello desde que la ricura decidió no dar más entrevistas, pero ¡oh, sorpresa!, la minurri parló nuevamente. Su silencio se debió a que la sacaban de contexto: "trato de ser livianita de sangre y tengo un sentido del humor donde suelo ser satírica. Eso fue contraproducente y derivó en algo muy extenuante".

Megan también soltó que es más solitaria que pelo en la sopa. "Puedo pasar días sin hablarle a un ser humano (...) No sé si podría querer tener una relación con alguien que requiera tener tanto tiempo solo como el que yo requiero".

Otro tema que la Fox comentó con la revista Allure fueron las cirugías plásticas. "yo animaría a cualquiera a primero hablar con un psicólogo y tratar de entender de adónde viene esta necesidad, ya que no siempre es un problema con los dientes, nariz o pera, porque la cirugía no aliviará esa inseguridad por ti".