"La Cuarta fue la primera en apoyarme, debe haber sido el 2004", comenta Rocío Marengo al hacer memoria desde que cruzó la cordillera y el diario pop la recibió con los bracitos abiertos...

Cualquiera pensaría que con una trayectoria en la que se cuenta haber entrenado con Pinigol, besuqueado a Marlen Olivari en Fiebre de Baile y tratado a Kenita de suelta de cascos, querría hacer borrón y cuenta nueva, pero nones.  “De todo aprendí, obviamente, si hay alguna persona a la que le hice daño, no fue mi intención, sin maldad”, dijo la rubia.

- ¿Sentiste que te tiraron veneno de puro gusto?

- Se dijeron cosas que no estuvieron buenas, pero las tomo como parte de esto. Siempre se dicen cosas buenas y malas, otras malas sin saber o inventadas, pero las tomo de quien vienen.

- ¿No quieres soltar el nombre del culpable? 

- Ya pasó. Las agresiones me hacen más fuerte. Si hablan mal, es porque les gusta vincularse a mí.

- ¿Sientes que tapaste bocas? Muchos no daban ni una chaucha por ti...

-  Mira, en general traté de no escuchar mucho esa mala onda, siempre hay gente a la que no le gusta que a uno le vaya bien, pero sí, estando en el lugar que estoy, es cerrar bocas.

- Toma, cachito ‘e goma.

- Claro, estar dentro de un programa exitoso, en un lugar importante, como jurado y siendo la única mujer en la tercera temporada, sin polémica ni estar vinculada o colgada de nadie, es mi respuesta. Es que estoy muy tranquila hace años, y eso tiene su premio y es el lugar que hoy tengo. No le debo nada a nadie, nadie me regaló nada, la luché y trabajé solita. Fue muy difícil para mí estar en Chile y hacerme mi lugar, yo estaba sola, yo lo he contado en Argentina, que cuando llegué acá, muchas chicas en Argentina  me tomaron envidia, porque vinieron y les fue mal y no pueden entender cómo yo sigo. Allá se mostró un informe de chilenos que hablaban re bien de mí y me emocioné. Está bueno, es gratificante ver que la gente diga que les doy alegría, es a lo que quiero apuntar y eso genera envidia en chicas que han querido venir a trabajar y no pudieron, sé que hay muchas chicas que me tienen envidia.

- Así a la rápida... ¿recuerdas el momento más brígido que te tocó vivir por acato?

- Cuando vine, yo estaba sola y me daba miedo la noche. Yo decía “estoy sola en un país donde no conozco a nadie, si me pasa algo no tengo a nadie que me ayude”... Porque me contrataban y volvía a mi casa muy tarde y sola.

- Haber sabido, para ser su espantacucos.

- Es que de a poco me fui haciendo de amigos y gente con la que puedo contar si me pasa algo. ¡Y ya pasaron casi ocho años!

- ¿Se te pasó por la chasquita armar las maletas y rajar de vuelta al Obelisco?

- ¡Nunca! Siempre me sentí en un lugar que tenía que cuidar y respetar por la confianza que me habían dado. Me he jugado y siempre digo que mi corazón es mitad argentino y mitad chileno, porque lo siento así.

- A lo Bichi Borghi style.

- ¿También lo dice? (...) Y bueno, te imaginarás que para los argentinos es chocante que una diga eso, pero lo siento así, me hago cargo. Porque es un país que me abrió las puertas y me dio un lugar, me siento querida y yo también los quiero.

GOLOSILLA

Ad portas del aterrizaje del 2013, la Ro está analizando sus ofertas, pero tiene hartas ganas de quedarse más tiempo y ojalá hacerle sonar el despertador a todos los chilenos laburantes.

“Estoy viendo propuestas, en Argentina trabajo en un matinal, me autorizan a venir a grabar Coliseo, pero estoy viendo proyectos para el año que viene, en una de esas me ven más seguido”, dice.

- ¿En la hora del desayuno? Mire que hay hartas vacantes en Mega...

- Me gustaría, me gusta el matinal, por el público al que apunta. ¡Me divierten los temas!

- Además que está su conocido amigo Lucho Jara, por ahí le ponen “vértigo” a las mañanitas.

- Lucho es mi amigo del alma, trabajar con él es un placer, estaría bueno, no descarto nada. Voy a escuchar para el año que viene a ver qué hago, si estoy más en Chile, porque este 2012 estuve más en Argentina. Pero todos los años son diferentes, tengo que ver y evaluar las propuestas.

AMOR POP

Como Coliseo Romano está en la lucha por llevarse a la casa el Copihue de Oro a mejor programa de talentos, pusimos a la mami del Koala contra la pared y le metimos ficha para que haga una promesa bien jugada para motivar a sus votantes.

“Ahora, no se me ocurre. Uhmmm... ¿Un destape?  Vamos a ver, depende, si lo ganamos, con la emoción como programa haremos algo divertido”.

- Si te rajas con una sesión como la que le diste al conejito Playboy, los buzones van a colapsar...

- No, eso sucedió en su momento. Sería importante ganar un reconocimiento del pueblo, pero no sé cómo puedo reaccionar con un premio tan importante en la mano, jejejé.