Una de las participantes que más llamó la atención en el reciente capítulo de The Voice fue Elizabeth Moya, una joven de 31 años oriunda de Curicó quien le dedicó su canción a su fallecido padre.

Moya interpretó “Sola otra vez” de Celine Dion y logró que todos los coaches de vieran vuelta con su espectacular voz. Tras el fin de su audición, Moya tomó la palabra y le reveló a Yuri que junto a su padre solían cantar en el coro de la iglesia juntos.

“¿Qué canción era la que más te gustaba cuando cantaban en la iglesia? ¿Cuál era era la canción que le cantaban a nuestro padre eterno?”, preguntó la mexicana.

“Cuan grande es él”, respondió Moya.

Sorprendida, Yuri realizó una particular confesión sobre el día de su muerte y su funeral.

“Por favor, cántamela. Esa canción querido público, si alguno sabe de lo que es cantar lo que es una canción cristiana, yo he dicho que el día en que Dios me lleve, que espero que falte mucho, quiero que me canten esa canción, es mi favorita”, reveló la cantante mexicana en el estudio.

Moya entonces se lució con una interpretación del himno religioso, emocionando profundamente a Yuri. En esa misma línea, la joven de Curicó reveló la importante conexión que mantiene con su padre.

“Cuando falleció, al principio me venía a visitar, y después en cosas cotidianas yo lo siento cerca”, explicó Moya.

En esa misma línea, Yuri comentó que “tú tienes que decir algo en este programa a través de su voz, de su testimonio y lo que Dios ha hecho en tu vida”.

Finalmente, la cantante escogió a la mexicana como su coach.