Espectáculos

Héctor Noguera y el rey de los gitanos: el legado de Melquíades en Romané

En 2000, el actor dio vida al patriarca gitano en Romané, una de las teleseries más queridas de TVN. Su interpretación marcó un hito en la televisión chilena y consolidó su estatura como actor de culto.

Cuando Romané llegó a las pantallas de TVN en abril de 2000, el país entero se rindió ante la historia de amor, tradición y choque cultural ambientada en el norte chileno.

La teleserie, escrita por Vicente Sabatini, Jorge Marchant y Sebastián Arrau, se transformó en un éxito rotundo de audiencia.

En el corazón de esa historia estaba Héctor Noguera, quien interpretó a Melquíades, el rey de los gitanos.

Su personaje lideraba a la comunidad itinerante que regresaba a Mejillones, enfrentando antiguos conflictos y el reencuentro con su hija Jovanka, interpretada por Claudia Di Girólamo.

El papel representó un desafío distinto para Noguera. Para dar vida a Melquíades, estudió el idioma, las costumbres y la jerarquía interna del pueblo gitano. “Tuve que aprender muchas cosas sobre ellos. Jamás imaginé interpretar a alguien así”, recordó en una entrevista a raíz del reestreno de la teleserie en 2021.

Melquíades (Héctor Noguera) junto a la joven gitana Milenka California (Blanca Lewin).

El actor destacó la riqueza visual y cultural de la producción. “Recuerdo con cariño la grabación, sus colores, el vestuario. Todo lleno de imaginación. Era un lindo contraste entre el norte y los gitanos”, dijo, subrayando la atmósfera única de la teleserie.

Noguera encontraba en ese mundo una oportunidad de descubrimiento. “Era muy interesante conocer a los gitanos, una etnia tan separada e independiente de la sociedad”, comentó, orgulloso de haber dado voz a una cultura poco retratada en la ficción nacional.

Con un elenco estelar -que también incluyó a Blanca Lewin, Francisco Melo, Francisca Imboden, Néstor Cantillana, Antonia Zegers y Francisco Reyes- Romané se consolidó como una de las producciones más vistas de la historia de TVN, con ratings que superaron los 40 puntos.

El magnetismo de Melquíades, su sabiduría y su sentido del honor lo convirtieron en uno de los patriarcas más recordados de la televisión chilena. Noguera logró imprimirle una mezcla de autoridad y ternura que trascendió la pantalla.

“Que se emita de nuevo es muy gratificante, porque quiere decir que la gente la quiere ver”, comentó años después, al celebrarse su retransmisión. Su interpretación, como la propia teleserie, sigue siendo sinónimo de identidad y emoción popular.

Hoy, Romané es parte de la memoria televisiva de toda una generación, y Melquíades se alza como símbolo del talento y la profundidad que definieron la carrera de Héctor Noguera: un rey que, desde la ficción, se convirtió en inmortal.

Más sobre:Héctor NogueraRomané

Lo último