Desde la semana pasada la retrofarándula se tomó la pantalla nacional.

Todo partió cuando reflotó el drama entre las gemelas Campos. Denisse fue invitada a "Primer Plano" para conversar sobre su distanciamiento con Daniella, sin presagiar que el programa tendría como invitada a Kenita Larraín.

Con la rubia, la conversación mutó de la pelea y líos de pantalones de las hermanas, a la rivalidad entre Kenita y Daniella por el amor de Iván Zamorano.

Y cuento corto: Kena habló fuerte y claro, y negó haberse metido en medio, mientras que Daniella el lunes, en "Síganme Los Buenos", late de Julio César Rodríguez, le tiró dardos e insistió en que Larraín la traicionó.

La prensa de aquel tiempo publicó en noviembre de 2002 el romance de Campos con el tenista Nicolás Lapentti, mientras Kenita confirmaba que con "Bam Bam" se estaban conociendo.

A más de una década del escándalo, María Eugenia no se amarga y señala que: "Hablar ahora para mí es una verdadera terapia, un desahogo y es cerrar ciclos, de cosas que en algún momento fui más evasiva, quizás no me defendí como debí, porque en ese momento Kenita era otra persona", aclara.

- ¿Y ahora cómo es?

-Hoy estoy diferente, ha pasado mucho tiempo, hablaría mal de mí si fuera la misma persona, ahora tengo familia, soy mucho más madura y en este momento me gusta que se aclaren algunas cosas. Para mí es muy sanador y si a la gente le parece bien o mal, es su opinión.

- ¿Por qué será que aún "prende" algo que pasó hace más de una década?

-Siento que los involucrados, Iván Zamorano, Carlos Moyá o yo, somos personas que aunque haya pasado tanto tiempo, seguimos siendo parte del ámbito público del país y me imagino que eso es lo que despierta el interés de las personas.

- ¿Eres la reina de la farándula, como algunos afirman?

-Sí, marqué muchos hitos, mi vida fue hace unos años una verdadera teleserie, con aciertos, desaciertos, una verdadera telenovela que siguió el público; y sí, de todas maneras me siento una persona muy importante en la farándula. Le guste a quién le guste.

- ¿En algún momento harás las paces con Daniella e Iván?

- Siento que estoy preparada para fumar la pipa de la paz, pero no así lo siento de Daniella, que creo que tiene la herida abierta, asegurando que yo le quité al amor de su vida. Iván, por su lado, siempre ha hablado pestes de mí dentro de su círculo más cercano.

- ¿A quién te refieres?

-Dentro de ese círculo están Pamela Díaz y Pancha Merino, que me hacen pebre en la tele.

- ¿No te han superado?

- Siento que Iván sí me tiene mala, que no me quiere ver ni en pintura, porque tiene la herida abierta, porque no me casé con él; y sí, creo que le causé un sufrimiento y le traje muchos problemas. Daniella siento que tiene la herida abierta porque le quité al amor de su vida, creo que ellos dos están menos resueltos en el sentido de tenerme mala y tenerme odio.

-¿Cómo resumes tu vida actual?

-Hoy soy una mujer nueva, que se conoce más, con más autoestima, más madura y con las cosas más claras. Ha evolucionado Kenita y, por lo mismo, fruto de eso tengo una familia maravillosa y una hija preciosa. Y con mi marido estamos en campaña para que ojalá Dios nos mande y nos pueda bendecir con un hermanito para Sofía.