El público que llegó al estreno de la obra musical "Mamma Mia" disfrutaba de la segunda canción, "Honey, Honey", cuando, sin previo aviso, prendieron todas las luces del Teatro Municipal de Las Condes.

"Estaba en escena, se vino el segundo tema y cuando salimos del escenario, bajando la escala, con micrófonos, todo puesto, nos dicen que hay un aviso de bomba", relató la actriz Josefina Montané, parte del elenco.

Mientras eso ocurría en bambalinas, por altavoz comunicaban a los asistentes que tenían que desalojar la sala.

"Fue algo rarísimo. Habían algunas personas corriendo, pero la gente igual estaba calmada, nosotras éramos las más nerviosas porque estábamos con toda la adrenalina del escenario. Se abrieron las salidas de emergencia y corrimos", indicó Josefina, con el pulso a mil.

Ante la alerta, las 700 personas que estaban en lugar, entre espectadores, gente de trabaja en el recinto y las 40 personas que son parte de la producción de "Mamma Mia", evacuaron inmediatamente.

Casi al instante, llegaron carabineros del Grupo de Operaciones Policiales Especiales (Gope) a revisar el teatro.

Llamada al 133

La capitán Carla Gattavara, de la Prefectura Andes, aseguró que "a las 20 horas la Central de Comunicaciones de Carabineros recibió la llamada de una persona de sexo femenino, la cual indicó que antes de que comenzara la obra escuchó a una mujer señalar que al iniciar el musical iban a hacer la instalación de un artefacto explosivo al interior del teatro".

Por suerte, sólo fue un susto, ya que se descartó que hubiera una bomba.

El alcalde de Las Condes, Joaquín Lavín, lamentó el hecho y aseguró que "fue un llamado muy corto, tienen que verificar si ese nombre es real, era un teléfono celular. Es primera vez que nos pasa algo así, es una lata para la gente porque era la función de estreno".

Tras la angustia que vivió, Josefina Montané comentó que "fue un poco shockeante pasar de una energía a otra, fue muy heavy".

Luego de saber que todo se trató de un aviso de falsa bomba, el elenco decidió que el "show debía continuar" e improvisó una canción en plena avenida Apoquindo.

Álvaro Gómez, que también participa en la obra, contó que "en mi vida nunca me había pasado algo así, menos que un elenco hiciera un musical en la calle".