Rodrigo Villegas fue el reciente invitado al programa De tú a tú, en donde el comediante conversó de todo con Martín Cárcamo.

En medio de su distendida conversación con el “rubio natural”, el comediante recordó un particular impase que tuvo en un antiguo trabajo, donde terminó a golpes con uno de sus compañeros.

Todo ocurrió cuando, tras titularse como prevencionista de riesgos, su hermano lo invitó a trabajar con él en la construcción. “Me pasó que me puso de capataz de jornales”, recordó, señalando que “los viejitos” le hacían caso.

Fue entonces que reveló que “me agarré a combos ahí”, relatando los detalles de cómo se dio la pelea con uno de los trabajadores.

“Mi hermano me dejaba a cargo de cosas. Había un camión (...) de estos que tienen cemento. Entonces, parece, no sé que le pasaba, me dijeron que estaba como idiota el camionero”, detalló.

“Nadie vino a salvarme”

Tras esto, contó que “me dice, delante de todos los viejos, ‘oiga, ‘¿usted sabe lo que le pasa al cemento si está más de dos horas ahí?”. Y yo, ignorante, no tenía ni idea, entonces le dije ‘tú con tu pega y yo con la mía’”.

El trabajador siguió insistiendo con su pregunta, mientras que Rodrigo le decía que lo dejara tranquilo. “Empieza a insultarme, entonces le dije ‘¿por qué me estás insultando? ¿qué te pasa?’”, recordó.

“Me empezó a insultar y los viejos pararon la hue… (Le decían) ‘¿Y, jefe, qué pasó?. Les dije, ‘no nada’. Y le dije (al trabajador) “quédate callado hue… sino, porque…'. ‘¿Sino, qué, qué?’. ‘Te voy a sacar la chuc…’, le dije, y así nervioso”, contó entre risas.

La situación continuó escalando cuando el trabajador le dijo a Rodrigo: “Ven pa’ acá'”. “‘Ven voh poh’ le dije. Y ahí la diferencia fue el hue… vino. Era camionero, así como un Hulk”, contó, haciendo reír a Martín.

“Venía y yo lo veía en cámara lenta. Entonces yo con la radio ‘atento, marca, atento, marca’. No me contestó nadie. Llamé hasta el topógrafo, ‘atento topógrafo’. Nadie vino a salvarme hue... Y ahí me agarré a combos, el hue… me quería volar la cabeza”, relató entre risas.

Rodrigo contó que fue su compañero quién dio el primer golpe, pegándole en el pecho. “Y yo le pegué, le pegué, lo agarré y caímos arriba de una carretilla de cemento. No, si, la pura cagada”, concluyó Villegas.