En los últimos veinte años, Paris Hilton (39), sufre de forma recurrente con una pesadilla. "Dos extraños me secuestran en medio de la noche, me registraron sin ropa y me encerraron en una instalación", comentó la socialité frente a una comisión del senado estatal de Utah. "Ojalá pudiera decirles que esta pesadilla inquietante fue simplemente un sueño, pero no lo es".

La socialité testificó en condición de víctima de abuso, durante la discusión de proyecto de ley que aumenta la capacidad de fiscalización gubernamental a los centros de tratamiento residencial para jóvenes, que finalmente se aprobó.  "Mi nombre es Paris Hilton, soy una sobreviviente de abuso institucional, y hablo hoy en nombre de los cientos de miles de niños que actualmente se encuentran en centros de atención residencial en los Estados Unidos", fueron sus primeras palabras.

Su relato es crudo. Señala que a los 16 años fue enviada a la escuela Provo Canyon durante once meses, donde asegura que fue abusada mental y físicamente. Entre otras cosas, detalló golpes, ingesta forzosa de pastillas, espionaje mientras se duchaba e incluso reclusión solitaria, y sin ropa, como castigo.

"Sin un diagnóstico, me vi obligada a consumir medicamentos que me hicieron sentir entumecida y agotada. No respiré aire fresco ni vi la luz del sol durante once meses -relató-. Cada vez que usaba el baño o me duchaba, se monitoreaba. A los 16 años, cuando era niña, sentí sus ojos penetrantes mirando mi cuerpo. Era solo una niña y me sentía violada todos los días".

"Cuento mi historia no para que alguien se sienta mal por mí, sino para arrojar luz sobre la realidad de lo que sucedió entonces y sigue sucediendo ahora -dijo Hilton al comité-. Las personas que trabajan, dirigen y financian estos programas deberían avergonzarse de sí mismas. ¿Cómo pueden las personas vivir consigo mismas sabiendo que este abuso está ocurriendo?", agregó.

"Hablar de algo tan personal fue y sigue siendo aterrador", agregó. "Pero no puedo irme a dormir por la noche sabiendo que hay niños que están experimentando el mismo abuso por el que pasamos yo y tantos otros, y tú tampoco deberías hacerlo".

La socialité también hizo un llamado al presidente Joe Biden y al Congreso para replicar la medida en la administración federal.  "Este es un primer paso -afirmó-. Este proyecto de ley definitivamente ayudará a muchos niños, pero obviamente hay más trabajo por hacer y no voy a detenerme hasta que ocurra el cambio".

En tanto, desde la institución acusada señalaron que no podían comentar nada sobre el período anterior al control de la administración actual. Los anteriores propietarios vendieron la escuela en el año 2000, es decir, los actuales dueños no alcanzaron a regir durante el tiempo en que Hilton estuvo allí.