Ana González fue una reconocida actriz y comediante chilena que incursionó en el teatro, la televisión, la radio y el cine. Con una trayectoria de casi sesenta años en la actuación, se convirtió en una de las actrices más populares y es recordada por su divertido personaje “La Desideria”.

Recibió el Premio Nacional de Artes, fue parte del elenco original de “La pérgola de las flores”, trabajó en teleseries y, pese a que nunca estudió teatro, dejó su huella en mundo actoral nacional gracias a su versatilidad y su talento.

Ana María Luisa Delicias Villela Francisca de Asís González Olea nació el 4 de mayo de 1915, en Peñalolén. Según consignó La Tercera, fue hija de Ana Olea, una costurera de quien heredó su carácter, y Manuel González Ossa, que pese a no ser su padre biológico le dio su apellido.

La actriz Carmen Barros afirmó al diario que “la marcó el abandono del padre a sus 7 años. La Desideria, decía, era su gran éxito, pero además todo un conflicto para ella, pues tenía mucho que ver con su historia personal. Ana no sabía bien a qué clase social pertenecía, y eso siempre la atormentó”.

Su carrera y su personaje más importante, “La Desideria”

Si bien no estudió teatro, González tuvo su primer acercamiento con la actuación a los 19 años, al ser invitada a participar en la obra “En casa de herrero cuchillo de palo”, consignó la Universidad Católica.

Posteriormente, la actriz llegó al Teatro de Ensayo de la Universidad de Católica donde trabajó junto a colegas como Silvia Piñeiro, Alejandro Jodorowsky, Héctor Noguera, Jaime Celedón, Delfina Guzmán y Nelly Meruane en más de 20 obras.

Fue parte del elenco de “La pérgola de las flores” (1960) donde interpretó a Rosaura San Martín, la madrina de Carmela (interpretada por Carmen Barros). También protagonizó “¡Esta señorita Trini!” (1958).

No obstante, uno de sus personajes más recordados fue el de la “Desideria”, una empleada doméstica deslenguada que venía del campo y que reclamaba por los derechos de las trabajadoras de casa particular.

El divertido personaje -que lucía extravagantes sombreros y plumas- apareció en Radio Pacífico por primera vez, en “La familia chilena”, consignó La Tercera, y luego en Radio Cooperativa con “Radiotanda”. Incluso La Desideria llegó a la televisión, participando en programas como “Sábado Gigante” con Don Francisco y “Una vez más” con Raúl Matas.

“La Desideria representaba muy bien quién era Ana”, afirmó Héctor Noguera al diario. “Esa lucha interna de clases que puede parecer medio torpe, era muy propio en ella. Vestía bien y tenía buena vida, pero leía tan, pero tan poco, a pesar de su biblioteca, que si le preguntabas por Esquilo, te decía que era un político o un país desconocido”, explicó el actor.

En 1969 recibió el Premio Nacional de Arte, un importante hito ya que fue la primera mujer en obtener esta distinción.

“La Desideria es auténticamente una mujer chilena, con su típica reacción, con su fuerza de matriarcado y su capacidad inmensa y de cariño. Este modesto personaje que yo creé me trajo el sostén espiritual en mi vida. Me ha hecho ser amiga querida, madre e hija de todo Chile”, aseguró la actriz en su discurso de aceptación, según consignó la Universidad Católica.

En 1971, González junto a otros cinco inversionistas -entre los que se encontraba Alejandro Sieveking, Bélgica Castro y la arquitecta Lute Sotomayor- compraron una sala de cine en la galería El Ángel, en el centro de Santiago.

Para el Golpe de Estado, la actriz se encontraba en el Festival de las Juventudes Socialistas en Alemania. “Le dio miedo regresar después de saber que habían asesinado a Víctor Jara. Le tomó tres o cuatro semanas decidirse en volver a Chile”, aseguró Sieveking a La Tercera.

Por su lado, Noguera aseguró al diario que la actriz era “políticamente ambigua”. “Nunca se supo si militaba o no en el Partido Comunista, a pesar de que tenía buenos amigos allí”, expresó.

Durante su carrera, la actriz participó en distintas teleseries como “La Trampa” (1985), “Matilde dedos verdes” (1988), “Villa Nápoli” (1991), “Marrón Glacé” (1993), “Champaña” (1994) y “Marrón Glacé, el regreso” (1996), entre otras.

En el cine, González fue parte de películas como “Entre gallos y medianoche” (1940), “P’al otro la’o” (1942), “La dama de las camelias” (1947), “Julio comienza en julio” (1976) y “Historia de un roble solo” (1982), entre otras.

De acuerdo a La Cuarta, Ana González se retiró del teatro en 1995 luego de olvidar su texto en medio de una función de la obra “Viejas” que protagonizaba junto a Yoya Martínez. Fue uno de los primeros síntomas del alzheimer que la aquejó hasta su muerte.

Su matrimonio y una desconocida relación

En 1946, la actriz Ana González se casó a los 31 años con el publicista José “Pepe” Estefanía, quien fue jefe de campaña de Jorge Alessandri. Estuvieron juntos hasta la muerte de Estefanía en 1961, consignó La Tercera.

En una conversación con “Pollo” Fuentes en “Venga Conmigo”, la actriz aseguró que “lo recuerdo todos los días de mi vida y a cada rato, con esa inteligencia, esa cultura que tenía. Desde que se hablaba, estaba atento, presente, capaz de crear, creativo”

No obstante, años después de su muerte, un reportaje de la revista Caras reveló que Ana González mantuvo una relación durante 40 años con la arquitecta Luz María Sotomayor.

Según consignó The Clinic, el reportaje entregó detalles sobre la relación que se mantuvo oculta, pero que no era un secreto para quienes conocían a la actriz. Héctor Noguera aseguró que “ni para mí ni para nadie del medio era un misterio que ellas eran pareja”.

“No andaban de la mano ni se besaban en público, pero nunca lo ocultaron. Y a mí me llamaba mucho la atención, para la época que se vivía, que fueran tan aceptadas en casas bien pitucas, donde el lesbianismo y la homosexualidad podían no ser bien vistos”, aseguró.

Por su lado, la actriz Carmen Barros mencionó que “el entorno de los actores es más abierto, humanista. Y Ana incluso hacía chistes con el asunto: ‘Ustedes saben cuando se me dio vuelta la chaqueta’, decía siempre. Los amigos sabíamos que eran pareja, claro que lo sabíamos”.

Su muerte

Tras años alejada de los escenarios, Ana González falleció el 21 de febrero de 2008 a los 92 años.

De acuerdo a lo informado por Emol en aquel entonces, la actriz falleció en su departamento en Santiago Centro producto de un shock séptico urinario, insuficiencia renal aguda e insuficiencia hepática. Desde hace más de una década que la intérprete padecía de un alzheimer severo que la había alejado de las tablas.

El medio detalló que a la actriz la acompañaba Luz María Sotomayor -mencionando que era una “amiga” de la actriz-, junto con su doctora y sus dos nanas.

Ana González junto con su personaje de “La Desideria” dejaron su huella en el mundo del teatro nacional, siendo recordada como una de las actrices más populares del país.