El participante expresó en pantalla sus descargos por la sanción.
Algo amurrado se vio a Sebastián Ramírez luego que Gran Hermano le comunicara que fue sancionado por el desubicado insulto homofóbico que lanzó a Viviana Acevedo.
En medio de una discusión, el sujeto llamó a Vivi “Juana tres cocos”, en un ataque que provocó indignación entre los participantes de la casa y dejó tremenda escoba entre los televidentes.
Ante la masiva exigencia de expulsión y luego de un fuerte llamado de atención del Movilh, la producción de Gran Hermano decidió tomar medidas y sancionar a Sebastián con la nominación directa a placa, sin derecho a ser salvado por el líder de la semana.
La reacción de Sebastián
La noche de ayer lunes, Gran Hermano llamó a Sebastián al confesionario para reprenderlo: “Advertí una situación que no voy a permitir en mi casa. Tiene que ver con términos desmedidos, absolutamente desubicados y fuera de lugar que has tenido hacia Viviana. Fueron palabras que hieren el espíritu de la convivencia y que, por supuesto, también han herido a tu compañera”, regañó el dueño de casa.
Tras informarle sobre la sanción, Ramírez admitió su agresión como un “error” y prometió disculparse.
“Doy cara a lo que pasó. Sí, creo que me equivoqué. Todos nos hemos equivocado. Y bueno, se me salió nomás, se me escaparon los enanos. Acepto el castigo y también aprovecho de pedir disculpas a la Vivi”, declaró.
Tras ello, todo el grupo se reunió en el living para conocer sobre la medida, momento que el sancionado aprovechó para ofrecer disculpas a Vivi, justificando su actuar en que le había “sacado los choros del canasto”.
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