Marco Enríquez-Ominami y Karen Doggenweiler son una de las parejas más estables en el mundo de la política y el espectáculo, tanto así que llevan casados más de 20 años.
De hecho, de tanto en tanto ninguno de los dos pierde la oportunidad de llenar de elogios a su pareja. Por ejemplo, ahora fue el político quien habló en extenso sobre su enamorada.
Y lo hizo en el programa Todo va a estar bien, de Vía X, el cual es conducido por Juan José Lavín. “Somos grandes amigos, cada uno es mánager del otro”, explicó de entrada el otrora aspirante a La Moneda.
“Yo he sido candidato, como ha sido público y notorio, ella siempre ha estado (…) En el Festival de Viña yo le dije ‘dale con todo’. Somos muy amigos, de no meternos (en los asuntos del otro), eso me lo enseñó ella”, complementó.
Y en esa misma línea, sostuvo que “Karen me enseñó algo que para mí era nuevo en las relaciones, voy a decir una cosa muy católica, pero que es verdad, hay que entregarse con todo y que dar amor produce felicidad”.
Luego, recordó que “la Karen, cuando nos conocimos, no jugó al misterio”.
Pero eso no es todo, pues también descaseteó una particular historia con la animadora.
“Me acuerdo de anécdota muy ridícula, yo la llamaba, en esa época no había WhatsApp, y ella llegaba reventada después del matinal y apagaba el celular. Yo la llamé 3 veces y en un mensaje de texto dije bien histérico ‘si ya veo que no me quieres responder es mejor que no nos veamos nunca más’”, le planteó.
Anécdota
Tras ese desesperado escrito, “ella me llama y me dice ‘ridículo, estaba ocupada y apagué el teléfono’, y yo contesté ‘no acepto que no me respondas’”.
“Ella me dijo ‘eres un intenso’, me sentí muy ridículo (…) ella me enseñó a desactivar en mí eso”, relató.
Por último, se justificó diciendo que ese comportamiento se debió a los fracasos sentimentales que tuvo previo a emparejarse con la animadora.
“Me iba muy mal, me rechazaban mucho”, remató.
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