Este sábado Naya Fácil se olvidó de los dolores de cabeza y lágrimas que le estaba costando "la gala del pueblo" que anunció con bombos y platillos hace apenas un par de semanas. Se arregló y se fue al concierto Perreolandia en el Club Hípico. Y entre perreos y cócteles, ya de madrugada, publicó en una de sus dos cuentas de TikTok:

"Mis facilines, doy gracias a todos por su apoyo en estos momentos, y más a cada persona y seguidor que puso su granito de arena para la 'nayatón'...

"Lamentablemente, tras la filtración de un programa de televisión de farándula, y porque quiero que sepan que mis intenciones siempre fueron a favor del pueblo, me veo en la obligación de comunicarles que ya no se realizará la Gala del Pueblo”.

Hace días que la influencer de 27 años venía anunciando un comunicado "bien hecho", "formal". La productora que la estaba ayudando en la organización convocó a una conferencia de prensa para el martes. Pero ayer se informó que el Estadio Español de Viña del Mar se bajó como lugar para la celebración.

La Tercera filtró un comunicado interno del estadio donde se decía que "definitivamente la gala del pueblo no va. No se dieron las condiciones y se logró el desistimiento por parte de la contratante. Un alivio”.

Fue la estocada que terminó de hundir el sueño de Naya. Su protesta por haber sido "discriminada" por la Gala del Festival de Viña de Mega el viernes 21 de febrero. Hay 260 invitados para esa alfombra roja. En la lista está Nicolás Solabarrieta, elegido "embajador" del certamen del 2024 a través de un concurso no oficial organizado por La Hora luego de que La Cuarta, realizadores oficiales de los "Reyes del Viña", no efectuaron la iniciativa.

Sin embargo, Mega no consideró a Naya, coronada "embajadora" junto a Nicolás y cuyo "piscinazo" fue tema país.

Nayadeth Neculhueque acusó al canal de Vicuña Mackenna en dos programas de Chilevisión, competencia del oficial en los días festivaleros. Julio César Rodríguez le ofreció que fuera su acompañante en la Gala. Diana Bolocco le regaló su cupo. La veinteañera no quiso. Su respuesta fue otra: haría su propia gala, "la gala del pueblo". Todos invitados.

Como Nayadeth es sinónimo de rating en televisión y redes, los paneles de farándula explotaron. Horas y hora abordando cada detalle. Figuras aplaudiendo, aunque ninguno iría porque ya estaban comprometidos con la Gala oficial.

Pero se les pasó un detallito: nadie le dijo a la reina de los "facilines" que poner en pie un evento para mil personas en un mes es imposible. No hubo quien le advirtiera o aconsejara que era una locura.

Guiada por la "rabia" contra Mega, Fácil viajó a Viña una y otra vez. Se consiguió el Estadio Español y los permisos necesarios. Pero debió bajar de mil a 500 los invitados "del pueblo", seguidores suyos que recibirían un pase. Los "famosos" para la red carpet iban como en 80, desde Fanny Cuevas a Anita Alvarado.

Después vino el tema costos: $125 millones de pesos, que la anfitriona pretendía solventar con los auspicios por la transmisión de algún canal de televisión. Era su carta bajo la manga. Canal 13 siempre le ofertó cobertura, más no emisión en vivo. Chilevisión, según Neculhueque, sí le dio esperanzas con una trasmisión en vivo.

Glamorama publicó a inicios de esta semana que ninguna de las dos señales tenía interés en realizar una transmisión en vivo. Solo que CHV aún no se lo comunicaba a ella y quedaba una última reunión pendiente, el jueves, donde se confirmaría la negativa.

Ya el viernes la influencer se vio enfrentada al mundo sobre sus hombros. Sin los millones para financiar su fiesta, sin canal para transmitirla, ni lugar para hacerla. Solo le quedó recurrir a sus "facilines", a quienes les pidió "una luca". Estaba al pie de una montaña que nadie podría escalar.