Los organizadores de Viña 2025, Mega y la productora Bizarro, han tenido detalles de mezquindad y falta de gentileza con sus animadores, Karen Doggenweiler y Rafa Araneda.

Partiendo por la Gala del Festival, donde a la pareja de profesionales que pelea el título de mejor dupla en los 64 años de Viña, la hicieron esperar harto más de lo que habían pactado.

Luego tuvieron que hacer cola con decenas y decenas de invitados para entrar a la pasarela. Y fueron arrinconados y apretujados para abrirle paso a Tonka Tomicic y su staff. En ese momento, además, la stylist de Karen cayó al suelo víctima de un empujón, junto a Laura de la Fuente. Nadie pidió disculpas ni prestó ayuda.

Según el reporteo de Glamorama -luego de que hablaron del asunto en Hay Que Decirlo-, otra muestra de la falta generosidad y en cierto punto rotería que sufre Rafa Araneda es la que afecta a su esposa, Marcela Vacarezza, y sus cuatro hijos, quienes viajaron desde Miami para acompañar al comunicador.

Los realizadores no les dieron a ninguno de ellos tickets para ingresar a la Quinta Vergara.

Marcela y los suyos entran al evento gracias a la cordialidad de una marca de zapatillas que auspicia Viña y también el espacio en YouTube que realizan los Araneda / Vacarezza. Esta empresa les regaló pases.

El primer día de Festival, la esposa de Rafa quiso entrar a su camarín con los hijos para darle una última muestra de cariño y apoyo a Rafa, como lo hizo sin problema en otras versiones. Ahora debió insistir, a duras penas lo logró, bajo la mira de guardias y con permiso solo por un instante. A los minutos fue retirada del backstage.

Quienes, a pesar de la insistencia y el deseo de los animadores, no lograron acceso a la zona tras escenario, fueron los jefes de prensa de Araneda y Doggenweiler.

En el mundo de las celebridades, se da por hecho que estos asistentes tienen pase libre. Antes, en el Festival también fue así. Pero ahora no. Y los dos periodistas, con amplio reconocimiento en el medio, se quedaron afuera. Les pasaron una credencial que ni siquiera les permite entrar a palco o platea. O aunque fuese a galería.